La caravana de hinchas que habían acompañado al equipo a la cancha de Lanús, lo escoltó en su regreso a La Plata pasada la medianoche y se unió a los pincharratas que se congregaron primero en la esquina de 7 y 50, punto de la ciudad en donde tradicionalmente suelen darse todos los festejos futbolísticos, para luego dirigirse a la Plaza Moreno, frente a la Municipalidad que fue iluminada con los colores rojo y blanco para homenajear al club.

"Nos vemos en la Plaza Moreno", escribieron desde la cuenta oficial de Estudiantes en redes sociales los jugadores, junto a una foto con la Copa, en el micro de regreso del partido.

Las puertas del Palacio Municipal fueron abiertas para que el plantel y dirigentes albirrojos festejaran en su interior y fue el intendente Julio Alak quien los recibió y les permitió celebrar y brindar por el campeonato, y saludar al pueblo pincha desde el balcón ante una plaza colmada.

"Felicitaciones al club Estudiantes de La Plata por obtener la Copa Argentina. Un logro más que enaltece a la institución y a nuestra querida ciudad", había publicado previamente el jefe comunal en sus redes sociales minutos después de que Estudiantes obtuviera el trofeo.

Otra de las destacadas presencias dentro del Palacio Municipal fue la del ídolo pincha y vicepresidente del club, Juan Sebastián Verón, la "Brujita", quien al no haber asistido a la Fortaleza Granate, se encontró con el plantel campeón en la Municipalidad en donde participó de los festejos y se unió a la alegría de todos los jugadores.

Ya en el balcón, los jugadores fueron ovacionados por la hinchada, y si bien intentó mantener un perfil bajo, el director técnico del equipo, Eduardo Domínguez fue incitado a tomar el micrófono para agradecer el acompañamiento.

Estudiantes se consagró anoche campeón de la Copa Argentina al superar en la final a Defensa y Justicia por 1 a 0 en la cancha de Lanús, con un gol de Guido Carrillo que le permitió dar una vuelta olímpica después de 13 años.

El "Pincha" consiguió la Copa Argentina y además se clasificó a la Copa Libertadores del año próximo, luego de una final que ganó merecidamente y que tuvo como condimento las despedidas del club del arquero Mariano Andújar y del goleador Mauro Boselli, quien se retirará del fútbol a los 38 años.

Así, consiguió su estrella número 12 en el profesionalismo y por primera vez ganó la Copa Argentina, competencia que siempre le resultó esquiva, y en el mismo escenario que lo vio descender en 1994.