El presidente de la ACTC aseguró que la tragedia siempre sobrevolará el automovilismo, que Balcarce está apto y que no falló nada; emocionado, dijo que prefiere que Diego no corra más " />
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17-11-2011 | Turismo Carretera | |||
Aventín: "No quiero levantar otro hijo de un circuito" | |||
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Lo previsible y lo imprevisible se mostraron en apenas 45 minutos. Con una postura dura, intransigente, de mentón alto y voz clara, Oscar Aventin dio la cara, luego de la muerte de Guido Falaschi ocurrida el domingo pasado en Balcarce. El presidente de la Asociación Corredores de Turismo Carretera (ACTC) no habló de responsables y cree que nada falló. Sin embargo, esa dureza con la que se pronunció contrastó con una imagen inesperada: el quiebre, el llanto, las lágrimas al recordar las palabras que cruzó con el padre de Falaschi en el velorio del piloto, en Las Parejas, preguntándose si hacían bien en dar lugar a que sus hijos abrazaran la pasión del automovilismo deportivo. Frente a muchos medios, los que habitualmente cubren la actividad y los demás, Aventin se refirió primero a quienes criticaron a la categoría y a él: "Hay personas que piensan que son cosas de las carreras y está todo bien. Otros, los enemigos, que está todo mal. Son los que no están dentro del ámbito del TC. Nosotros estamos en el medio, hay que seguir aprendiendo, corregir cosas y dialogar. Nuestros pilotos aún no hablaron con nosotros". Con sentido político, el dirigente destacó los progresos de la disciplina en materia de seguridad: "Hemos hecho los mejores esfuerzos. Avanzamos con lo que no se había hecho en 50 años, pero la tragedia siempre va a sobrevolar el automovilismo". Una de las preguntas más recurrentes fue si Balcarce estaba en condiciones de albergar una fecha de TC. Y Aventin explicó: "Balcarce estaba apto para correr. Está siendo utilizado por el ACA para categorías zonales. Es un escenario difícil, pero no más peligroso que otros. Hay pequeñas cosas por mejorar. Es cierto que yo hablé durante el fin de semana de la infraestructura del autódromo. Es un predio muy complicado, porque no hay espacio. Se nos hace muy difícil ir a Balcarce. Hace un tiempo pedimos a los pilotos del TC Pista que no fueran allí, así teníamos más espacio para el TC. Pero dijeron que no; todos quieren correr ahí. Es un circuito atractivo para los conductores, y el público cuenta con una vista formidable". Luego brindó más detalles sobre el autódromo Juan Manuel Fangio: "La pista estaba excelente. Al menos lo manifestaron durante todo el fin de semana los pilotos. Yo estaba disgustado por la falta de comodidades, los sanitarios y la estética. El responsable del circuito hizo la siesta, porque se quemó una bomba de agua y dejó sin ese elemento vital a un gran sector del público". La autocrítica que muchos esperaban de Aventin no llegó: "Fallar, no falló nada. Lo que desencadenó la tragedia fue el despiste de Leo Larrauri. Hablé con él y está muy mal, destrozado, muy destrozado... No sabe qué pasó, se le escapó el auto de las manos. Giallombardo lo esquivó bien y Falaschi, tapado por Giallombardo, se lo encontró y después impactó contra los neumáticos, que no lo dejaron en el medio de la pista. El golpe de Ortelli lo dejó de pechito para el impacto. Nosotros no tenemos un responsable. Esperamos que actúe la Justicia. Es una fatalidad". Pero luego la palabra "autocrítica" sí estuvo en boca del directivo. La mencionó cuando se refirió a los neumáticos sueltos: "La autocrítica que hacemos es en el tema de las gomas sueltas; eso no tiene que fallar. Pero en cuanto al accidente, cumplieron su cometido: amortiguar el impacto ante el muro de contención. Si este accidente hubiera ocurrido no bien comenzada la carrera y hubiera tenido otras consecuencias, tendríamos que haber detenido la prueba por las cubiertas sueltas". En la conferencia, brindada en el salón Octavio Suárez del edificio Juan Gálvez, de la ACTC, se encontraban con el presidente sus pares de la comisión directiva Hugo Mazzacane y Rubén Gil Bicella; el presidente de la Comisión Asesora y Fiscalizadora (CAF), Carlos Álvarez; el doctor Rodolfo Balinotti, responsable médico de la entidad, y el responsable técnico de la categoría, Alejandro Solga. Sobre el accidente del viernes pasado, en el que Agustín Canapino salió despedido hacia el otro lado del muro de contención de la curva 1, Aventin indicó: "Todos los días se aprende algo. En este caso nunca imaginamos que eso podía pasar. Pero pasó. En Le Mans una vez un auto se enganchó con otro y saltó a una tribuna. Hay imponderables en una actividad riesgosa. Pero siempre trabajamos para mejorar. Lo que sucedió no modifica nuestro accionar en seguridad. Nos quedan pocas cosas por hacer, el golpe lateral no se puede modificar". Acerca de ese incidente, Álvarez agregó: "Tras el despiste, trabajamos en el área de escape, quitamos los autos y prohibimos la ubicación de público en ese sector". Sobre el final, Aventin mostró una cara distinta. Lágrimas, dolor. Con la voz quebrada relató: "Yo no quiero mentirle a la gente. Ni a los padres de los chicos que impulsan a sus hijos a correr. A los 22 años un chico es joven, pero es mayor, y puede discernir si correr o no. Toqué este tema con los padres de Guido al lado del féretro. ¿Es posible que estemos equivocándonos al impulsar a estos chicos a una actividad riesgosa? Yo no sabía qué decir, y ante mi pregunta, Víctor Falaschi me respondió: «No me arrepiento. Y volvería a hacerlo, porque él era feliz corriendo en tres categorías. Era lo único en lo que se ocupaba». Es muy difícil tener la claridad como para saber la respuesta. Nadie obliga a nadie a correr. Abrazamos esta pasión, desmedida tal vez. La adoptamos como un sistema de vida. Ofrendamos la sangre de nuestros hijos, apoyándolos para que desarrollen una actividad. En el TC somos 30 o 35 padres que estamos a la vera del circuito. Castellano, De Benedictis, Oyhanart, Gil Bicella, Giallombardo, Girolami, Falaschi... Estamos mirándolos, se acepta el riesgo. Tal vez algo no esté bien... Yo querría que mi hijo, Diego, no corriera más. Y no quiero levantar otro hijo de un circuito...". El responsable médico de la ACTC, Rodolfo Balinotti, explicó la causa del deceso de Falaschi: "El equipo forense médico de la zona de Balcarce y el jefe médico de Mar del Plata conocieron por la autopsia que el fallecimiento se debió a la fractura de la base del cráneo. Esto no necesariamente determina la muerte instantánea. Depende de la magnitud de este tipo de fractura", expresó el doctor, que asistió a Guido no bien sucedió el accidente. |