El legislador recordó que "a fines de febrero la Cámara Nacional Electoral solicitó la intervención del máximo tribunal y hasta la fecha no se produjeron novedades, por lo cual urge resolver la situación atento está por comenzar el cronograma electoral y no podemos tener dudas respecto de la autoridad comicial, pues estamos poniendo en peligro la propia realización de las elecciones".

De acuerdo con el legislador, "desde su misma designación en diciembre pasado -realizada en absoluta violación de las más elementales normas constitucionales y transgrediendo la propia ley que rige la materia y la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación- todos los sectores políticos se manifestaron en contra de la subrogancia que se le otorgó al Dr. Laureano Durán para que ocupara los cargos de Juez Penal y Juez Electoral en la Provincia de Buenos Aires, llegándose incluso a incoar distintas demandas judiciales".

"Sobrevino a ello -continuó- una serie de fallos judiciales dictados en sede penal por sus superiores que lo apartaron del conocimiento de las causas "por no reunir los requisitos para ser juez", y luego un pedido de la Cámara Nacional Electoral a la Corte Suprema de Justicia de la Nación para que precise, en su condición de máxima autoridad del Poder Judicial de la Nación, si Durán se encuentra investido de los atributos constitucionales y legales propios de la función encomendada".

Ante esta situación y la inminencia del inicio del cronograma electoral De Pietro solicitó "que el máximo tribunal defina si Duran puede o no estar a cargo de las elecciones en el principal distrito electoral del país, donde sufragaran casi doce millones de personas".

Finalmente, sostuvo que "el planteo de la Cámara Nacional Electoral debe resolverse de manera urgente, para terminar con la incertidumbre que implica tener al frente del juzgado electoral a un magistrado cuestionado por la propia justicia", dijo el legislador mientras sostuvo que "no debemos olvidarnos que, como lo dice el órgano máximo electoral de la Nación, los tribunales de justicia son los únicos que pueden garantizar la genuinidad del sistema, controlando todo el proceso democrático de formación y expresión de la voluntad política del pueblo, y flaco favor le hace a la transparencia y legitimidad no tener certeza sobre si quien ejerce la magistratura cumple con los requisitos del cargo".

jf