|
|||
20-05-2012 | Desde la Comisión Relatora del nuevo Código Penal | |||
"En el nuevo C贸digo, el valor m谩ximo no ser谩 la propiedad sino la vida" | |||
|
|||
El juez Eugenio Ra煤l Zaffaroni llega justo media hora antes de la cita. La ex diputada socialista Mar铆a Elena Barbagelata es puntual; viene de sortear el alborotado final de jueves en el centro de la Ciudad. Casi de inmediato, le sigue el macrista Federico Pinedo, favorecido por la proximidad de su despacho en el edificio anexo de la C谩mara Baja, del otro lado de la Avenida Rivadavia. El c谩lido anfitri贸n es el jefe de la bancada radical en Diputados, el constitucionalista Ricardo Gil Lavedra. En un Parlamento despoblado y casi sin actividad por la cercan铆a del fin de semana, abre las puertas de su despacho para reunir a los integrantes de la flamante comisi贸n encargada de articular una tarea tan vital como ambiciosa: la redacci贸n del proyecto de reforma del C贸digo Penal argentino. El ex camarista y ex ministro de Seguridad bonaerense, Le贸n Arslanian, es el 煤nico ausente. Pero con aviso. "Ten铆a un compromiso acad茅mico impostergable", lo disculpa Gil Lavedra. Comienza una charla amena, con los c贸digos de algunos antiguos viejos amigos y conocidos. Todos aceptaron la propuesta de Tiempo Argentino de reunirse por primera vez en una entrevista en conjunto para discutir los ejes y alcances de la tarea que se inici贸 en la tarde noche del martes 8 de mayo, cuando la presidenta Cristina Fern谩ndez los convoc贸 a la Casa Rosada para firmar el decreto de constituci贸n del equipo de trabajo, que preside Zaffaroni. Llevan apenas una reuni贸n de trabajo desde aquel encuentro, pero comparten un primer horizonte de coincidencias. Sin excepci贸n, aceptan que el desaf铆o se traduce en tarea ardua: la de ordenar, hacer "legible", de aplicaci贸n clara y despejada de contradicciones la ley que tipifica los delitos y sus sanciones y que hoy, en el diagn贸stico de Zaffaroni, es apenas un pu帽ado de "escombros" de aquel C贸digo sancionado en 1921. Desde entonces, la normativa sufri贸 m谩s de 1000 modificaciones y enmiendas y qued贸 enmara帽ada por normas especiales, dispersas, emergentes de coyunturas pol铆tico-sociales. El impacto de las denominadas "leyes Blumberg", aquel paquete de reformas y elevaci贸n de penas aprobado por el Congreso en 2004 tras el secuestro y asesinato del joven Axel Blumberg, aparece sin esfuerzo en esa reconstrucci贸n. El C贸digo no es sometido a una revisi贸n integral desde la d茅cada del sesenta. La meta de una reforma "integral" para dar coherencia a las penas es el punto de partida del debate, pero tambi茅n el punto de llegada al que aspiran los integrantes de la comisi贸n. Zaffaroni se entusiasma en los ejemplos de esa disparidad, muchas veces abordada desde el reclamo simpl贸n de ganarle a la inseguridad con penas m谩s altas y severas, o de defender las interpretaciones que hoy ponen el derecho a la propiedad por encima del derecho a la vida. Pinedo se anima a las bromas, a jugar el rol de ni帽o indisciplinado: "Soy la derecha oscurantista", dice entre risas cuando el resto le recuerda que deber谩 actuar como una suerte de 驴moderador? entre posturas antag贸nicas. Barbagelata plantea sin titubeos una primera disidencia: cree que la exclusi贸n del debate sobre el aborto en la discusi贸n del nuevo proyecto significa "una oportunidad perdida". "A una reforma de esta envergadura la entiendo comprendiendo este tema. Obviamente no voy a suscribir a la penalizaci贸n de una mujer que recurre a un aborto. Pero s铆 creo, y no lo hemos conversado, que hay una postura de la Corte Suprema reciente en un fallo por unanimidad que incorporaremos en la letra del art铆culo 86 actual. No podemos soslayar la interpretaci贸n de la Corte. Espero que lo conversemos oportunamente", se anticipa. Acaba de escuchar los argumentos de Zaffaroni sobre los antecedentes en que esa discusi贸n frustr贸 proyectos clave. Gil Lavedra promete la consulta a una "multiplicidad de fuentes". Tambi茅n el intercambio con los actores del mundo judicial y acad茅mico que aspiren a sumar opiniones. "Abriremos un proceso de consulta para que todo est茅 rodeado con la m谩xima legitimidad posible", afirma. - 驴Por qu茅 es necesaria esta reforma? - 驴En qu茅 puede cambiarle su vida al ciudadano com煤n una reforma en el C贸digo Penal? Pinedo: - Adem谩s est谩 la cuesti贸n de prevenci贸n que genera el conocimiento de las normas. Si nadie sabe qu茅 es lo que rige, el C贸digo pierde su facultad educativa, una parte importante de su funci贸n. - 驴Cu谩les son los aspectos m谩s confusos del actual C贸digo? - El debate p煤blico -muchas veces medi谩tico- que acompa帽a la discusi贸n sobre delitos y penas es la cuesti贸n de la "inseguridad". 驴De qu茅 manera se articula esta discusi贸n que ustedes tienen por delante con este debate que muchas veces implica la discusi贸n de penas m谩s altas? GL: - La mejor pol铆tica criminal es cuando no sucede ning煤n hecho delictivo. El Derecho Penal act煤a cuando el hecho ya fue cometido. P: - Hay todo un tema sobre cu谩les son las valoraciones que hace la sociedad de qu茅 es lo que est谩 bien y qu茅 es lo que est谩 mal, y qu茅 es favorable a la convivencia social y qu茅 es lo que es contrario. Eso es una escala de valores y el C贸digo Penal es un reflejo de esa escala de valores, pero que tiene que articularse con el resto del Estado. En un punto, si hac茅s un C贸digo que no tenga nada que ver con la realidad, las cosas importantes se te pasan por debajo de la mesa y te termin谩s dedicando a correr chiquitos por la calle. Hay gente que tiene un pensamiento sencillo y equivocado que es: "pongamos las penas hasta el infinito y ah铆 se acaba todo". La verdad que no hay ning煤n tema en la vida que sea monocausal, entonces hay que manejar eso en un contexto general de lo que es nuestro pa铆s. En ese contexto, las valoraciones que hace el C贸digo Penal son importantes. GL: - Sanciona las violaciones m谩s graves de la convivencia. Lo que la sociedad considera como m谩s grave, el C贸digo lo asocia, como consecuencia, a una pena. Es la 煤ltima medida, pero antes est谩 todo el resto del tratamiento jur铆dico, que tambi茅n protege los bienes jur铆dicos, pero de diferente manera. -Un ejemplo paradigm谩tico es el de las "leyes Blumberg"... P: - El tema es c贸mo caminar en un camino que por un lado permita la reinserci贸n de la gente que ha delinquido y que, por otro lado, proteja a la sociedad de situaciones extremas de comportamientos antisociales o antihumanos. Ese camino es opinable, es gris, hay que buscarlo, pero siempre se puede encontrar un camino razonable. Por supuesto que siempre hay extremistas de los dos lados, y en la democracia los consensos pasan por el medio razonable y no por los extremos. Trataremos de buscarlos. - 驴Podr铆an especificar algunas de las mayores contradicciones que se pueden subsanar? B: - Hay discusiones sobre cu谩l es la pena m谩xima del C贸digo. Eso deber铆a mover a la reflexi贸n al ciudadano com煤n. Si un C贸digo Penal no tiene claro cu谩l es su pena m谩xima, entonces estamos en problemas. - 驴Qu茅 aspectos estudian revisar respecto a la figura de la v铆ctima? GL: - La acci贸n penal en sus comienzos fue privada, es decir, el particular ofendido instaba a la acci贸n frente a la tribu, frente al Consejo de Ancianos, lo que fuere. Con la conformaci贸n de los estados nacionales, el Estado -por eso confiscar- expropi贸? Z: - Expropiar se paga, la confiscaci贸n no se paga y no se pag贸 nunca (risas). GL:- Le confisc贸 el conflicto a la v铆ctima y le dijo: "No se帽or, usted se queda ah铆. De esto se encarga el Estado." As铆 nace la acci贸n penal p煤blica, el individuo a un costado y se encarga el Estado. Hay un movimiento que incluso se ha plasmado en las convenciones internacionales de Derechos Humanos, que tienden a revalorizar el papel de la v铆ctima. Ahora, por supuesto que a la v铆ctima hay que empoderarla en el campo que dijo Ra煤l. En los delitos contra la propiedad, en los campos en los cuales no se provoque una alteraci贸n social significativa. Porque en los otros subsisten las razones de la acci贸n estatal, que es tratar de mantener una conveniencia sobre la base de ciertos valores. Uno no podr铆a dejar que la v铆ctima concilie un homicidio alevoso, obviamente. B: - Un movimiento del Derecho que en los 煤ltimos a帽os ha revalorizado este punto y que va a ser considerado en nuestro trabajo tambi茅n. P: - Podr铆a haber m谩s delitos que se llaman de instancia privada, es decir, que s贸lo se impulsan si los impulsa la v铆ctima. B: - En el proyecto de 2006 hay un detalle bastante interesante. GL: - Est谩 bien lo que dice Federico. Cuantos m谩s delitos de instancia privada, solamente se inicia la persecuci贸n penal si hay denuncia. Otra que ten茅s es que en los casos en que se aplique un principio de oportunidad y el fiscal decida no impulsar la acci贸n, s铆 pueda seguirla la v铆ctima si quiere. - 驴Se incluir谩n penas alternativas a las conocidas? GL:- Acercarse o no acercarse. B: - Tampoco son cosas novedosas, est谩n en otras leyes, como la ley de violencia contra la mujer. Es la oportunidad de sistematizarlas, son cosas que abren el abanico de posibilidades. Z: - Son algunas formas que son hijas del viejo confinamiento, es decir, no salir de determinado barrio. Entre las instrucciones especiales, existe la posibilidad de asistir a cursos, terminar la escolaridad. GL: - Impartir los cursos cuando se tiene una habilidad especial. P: - Clases de c贸mo abrir una caja de seguridad, ese tipo de cosas (risas). B: - Muchas de esas leyes est谩n incluidas en la protecci贸n especial de ni帽os, ni帽as y adolescentes. - En el Congreso hay varios proyectos sobre la despenalizaci贸n de la tenencia de estupefacientes para consumo. Y se supone que dentro de poco tiempo van a ser tratados en el recinto. 驴C贸mo se empalman los temas puntuales que se discuten en el Congreso con los cambios que se hacen en el C贸digo Penal? Z: - Se compatibilizan, no es complicado. P: - Porque lo que vamos a hacer es elevar una propuesta al Poder Ejecutivo para que eleve una propuesta al Congreso. Si en el Congreso ya hay consenso para una cosa determinada, entonces ir谩 por ah铆. En definitiva va a volver al mismo lugar. B: - Lo mismo va a pasar con la trata. P: - O el r茅gimen Penal Juvenil. GL: - El Congreso tiene que sancionar la Ley Penal Juvenil. Es una deuda incre铆ble. Estamos dispuestos a llevarlo la semana que viene si es preciso. Z: - Estamos en violaci贸n de la Convenci贸n Internacional en ese aspecto. GL: - Ser铆a bueno que el oficialismo acceda a tratar la Ley Penal Juvenil. Y en el caso de la despenalizaci贸n de la tenencia para consumo, y no s贸lo de la tenencia, sino de todo lo que rodea el 谩mbito de libertad que es el consumo -un tema que tiene cierta conflictividad-, nosotros estamos dispuestos a llevarlo cuanto antes a discusi贸n al recinto. Incluso eso hace a la autonom铆a personal. Y est谩 bien que el Congreso manifieste su voluntad pol铆tica en ciertos temas trascendentes. Est谩 mal que siga metiendo "penas" como las mete, a la marchanta. Pero en estos temas importantes est谩 bien que el Congreso avance. Los cuatro miembros de la comisi贸n est谩n convencidos de que antes de tipificar nuevos delitos, la mayor tarea ser谩 dar coherencia y efectividad al conjunto de sanciones. - El nuevo C贸digo, 驴tiene que tener una tipificaci贸n de lo que llamamos delitos inform谩ticos? P: - S铆, claro. Se avanz贸 t铆midamente en eso en algunas leyes informales. No s茅 si es un cap铆tulo o es parte de otra cosa. Z: - Habr铆a que pensarlo bien. Porque en definitiva son nuevos medios t茅cnicos para cometer viejos delitos. GL: - La interferencia de comunicaciones. Hay un delito hoy que es el de intercepci贸n de correo. Las intercepciones de los mails son lo mismo, antes interceptaban al tipo que llevaba las cartas, ahora lo hackean. Z: - Antes se llamaban los salteadores del camino y ahora se llaman los piratas del asfalto. - En el proyecto de 2006 se inclu铆a la figura del genocidio y a los delitos de lesa humanidad. 驴Qu茅 reflexi贸n les merece? P: - Eso es clar铆simo. La doctrina de Derechos Humanos es posterior al C贸digo Penal y tiene que estar incorporada. Es constitucional. B: - La Argentina fue pionera en llevar a Naciones Unidas y al 谩mbito internacional el tema de desaparici贸n forzada de personas, tenemos una experiencia terrible que se ha plasmado. Argentina fue protagonista de estos delitos. - 驴Hubo alguna definici贸n de la metodolog铆a de trabajo en la primer reuni贸n que tuvieron? GL: - Vamos a abrir un proceso de consulta para que esto est茅 rodeado con la m谩xima legitimidad posible. Y a escuchar tambi茅n opiniones de las universidades, del Colegio de Abogados. -Conformemos un escenario hipot茅tico en el cual, en un tema puntual, un miembro no est茅 de acuerdo. 驴Qu茅 sucede? Z: - Creo que sobre la cuesti贸n de fondo, lo pol铆tico-criminal, lo que hay que tener en cuenta es que tenemos una legislaci贸n que reparte demasiado poder punitivo indiscriminadamente. P: - Mucho m谩s del que se aplica. Z: - Hay que tratar de diferenciar un poco los hechos graves, contra la vida, la integridad f铆sica, de los hechos menos graves. Hoy hay una reincidencia gen茅rica. Hoy que un tipo libre un cheque sin fondos y dentro de tres a帽os se agarre a trompadas con alguien en la esquina, me dice poco. Puede suceder que haya un hecho de gravedad contra la vida, uno solo, que me diga bastante sobre una tendencia del mismo sujeto. Eso es lo que hay que diferenciar. Vamos a tener delitos graves para los cuales la pena ser谩 grave y otros que no me marcan ninguna tendencia a una criminalidad grave, para lo cual tengo que adecuar las penas de otra manera. No ponerle una medalla, pero s铆 otra pena. P: - Ese es el camino del medio. - El delito contra la vida? GL: - Tiene que ser lo m谩s protegido. Si agarramos un C贸digo Penal y miramos el cap铆tulo de delitos contra la propiedad y lo comparamos con uno de delitos contra la vida, observamos que en muchos casos est谩 m谩s protegida la propiedad que la vida. Z: - Un robo a mano armada, y puede ser mano armada a cuchillos, tiene una pena m铆nima de cinco a帽os. Una tentativa de homicidio puede tener una pena de cuatro. Hay un problemita, 驴no? Un desfasaje. No es lo mismo un robo a mano armada con un cuchillito que un asalto a un banco con una ametralladora. Hay que adecuar esas cosas. - 驴La reforma del C贸digo Penal debe ir acompa帽ada de una reforma del C贸digo Procesal? GL: - Inexorablemente. - 驴Y en manos de qui茅n est谩 esa tarea? Z: - No me gusta la responsabilidad penal de una persona jur铆dica. P: - A m铆 tampoco, pero bueno. B: - A m铆 s铆 me gusta, pero son largas discusiones. GL: - Si se incorporara, eventualmente, como lo incorporan los c贸digos modernos, necesitar铆a necesariamente un correlato procesal. Hay leyes que ya lo han incorporado. - 驴Ven la posibilidad de hacer alg煤n tipo de recomendaci贸n en ese sentido? Z: - Va a haber cosas que salen del proyecto. Tenemos que descargar a la justicia de procesos menores. Uno se hurta una botella de Coca-Cola en Londres y hay una multa, un rato y listo. Napole贸n no estaba mal cuando divid铆a cr铆menes, delitos y contravenciones, porque necesitaba dinero para conquistar toda Europa y no lo iba a gastar en estupideces. B: - Hay juzgados en ciudades medianas donde el 40% de sus causas son amenazas. Z: - Le digo a un vecino: "te voy a matar", y listo, denuncia por amenazas. Despu茅s hay hechos que s铆, aunque parezcan formalmente... Lo empujan a un hincha a la salida de la cancha y le quitan la gorrita, que sale tres pesos, y eso es robo y violencia a la persona. P: - Puede ser en banda, con lo cual es un agravante. GL: - Por muchas razones. Me parece que el sistema de enjuiciamiento ha demostrado una ineficacia absoluta para investigar los delitos complejos. El tiempo que demoran los casos en llegar al juicio propiamente dicho es terrible. Un fracaso estructural. B: - Y delitos que no son complejos. Hay una investigaci贸n sobre el tema de violencia familiar, donde todas las investigaciones son una especie de c谩scara, no existe la investigaci贸n. Termina en nada porque tampoco hay nada. - En la discusi贸n seguramente estar谩 la inclusi贸n de nuevas figuras... P: - Las maldades humanas no son tantas, son acotadas. Los mandamientos son diez y algunos no son m谩s delito, por suerte. "No desear谩s a la mujer de tu pr贸jimo", es imposible. 隆Ahora me echan de la Iglesia! (risas). - La participaci贸n opositora puede ser un elemento que ayude. Z: - El 煤nico C贸digo que se sancion贸, se sancion贸 as铆. B: - El sentido com煤n indica que vos pod茅s ir ahorrando tambi茅n plazos de discusi贸n. GL: - Es auspicioso. Es de suponer que nuestros bloques parlamentarios lo van a apoyar. - Como opositores, 驴c贸mo tomaron la convocatoria? 驴Con sorpresa? Por la argumentaci贸n de la oposici贸n de falta de di谩logo con el gobierno... B: - Creo que es un camino inteligente y la experiencia que nosotros tenemos en el 谩mbito de los derechos de la mujer es justamente esa. Z: - La cr铆tica al pluripartidismo, es decir a la democracia m谩s radical, que se ha hecho siempre y tomo como paradigma a Carl Schmidt, es que "el partidismo parte y la Naci贸n tiene que ser una". Esa cr铆tica se basa y se refuerza en la medida en que la lucha pol铆tica no es capaz de generar estos espacios. Este espacio debilita la cr铆tica autoritaria. Son las que demuestran que el pluralismo existe y no es un impedimento para el funcionamiento y el desarrollo de la Naci贸n. Al contrario, lo fortalece. Le贸n Arslanian: "Si existiera relaci贸n entre inseguridad y pena, el problema estar铆a resuelto" El 煤nico de los miembros de la comisi贸n encargada de la reforma del C贸digo Penal que no pudo asistir a la entrevista fue el abogado penalista y ex juez en el Juicio a las Juntas, Le贸n Arslanian. Confiesa que le hubiera "gustado" ser parte de la mesa, pero sus obligaciones acad茅micas se lo impidieron. "驴Por qu茅 es necesaria una reforma del C贸digo? El actual tiene 91 a帽os y se llen贸 de figuras penales y acciones nuevas m谩s all谩 de los incrementos progresivos de penas, en la medida que para la gente se hac铆a manifiesto que no era suficiente la magnitud de las que hab铆a. Y se transform贸 en un adefesio. Se pens贸 que era el 煤nico instrumento para enfrentar los fen贸menos de inseguridad, creyendo, como dijo Juan Pegoraro, que la Ley Penal es un talism谩n, que uno lo toca y cambia la realidad", explica. Arslanian asegura que "hay una deslegitimaci贸n" del sistema penal. "El porcentaje de condenados que cumple efectivamente la pena que se le impone y al cual se le aplica el r茅gimen progresivo de pena, con tratamiento carcelario tendiente a la resocializaci贸n, es 铆nfimo. Muchas veces las personas agotan en una prisi贸n preventiva las condenas que puedan recibir, el tiempo que pueden merecer de pena." - 驴Existe alguna relaci贸n entre la disminuci贸n de la criminalidad y el aumento de las penas? El aborto, una cuesti贸n sin acuerdo La despenalizaci贸n del aborto no est谩 incluida en el proyecto de reforma al C贸digo Penal que la presidenta Cristina Fern谩ndez recibir谩 el a帽o pr贸ximo. "Porque en todos los casos en los que se discutieron c贸digos penales y se modific贸 lo referente al aborto eso trajo dificultades de car谩cter pr谩ctico y dificult贸 la sanci贸n del C贸digo. Me estoy refiriendo al caso de Espa帽a, Alemania, Austria. Y ese fue uno de los motivos por los cuales se par贸 la reforma del 2006", explica Zaffaroni antes de aclarar que fue 茅l quien le propuso a la presidenta dejar el debate para otro momento. "Pensamos que es un tema que merece una deliberaci贸n p煤blica aut贸noma. Desmerecer铆amos la cuesti贸n de la interrupci贸n voluntaria o no del embarazo si la incluimos dentro de un conjunto enorme de disposiciones", refuerza Gil Lavedra. Este es uno de los puntos en los que no hay acuerdo entre los miembros de la Comisi贸n y es la voz de Babagelata la que lo pone de manifiesto. "Quiero dejar aclarado que es una oportunidad perdida. Entiendo las razones pero en este sentido mantengo mi postura. Obviamente no voy a suscribir la penalizaci贸n de una mujer que recurre a un aborto", disiente la ex diputada socialista, quien destaca un reciente "fallo de la Corte Suprema" en este sentido. "Son temas muy de fondo y que requieren un consenso importante. La democracia es un poco eso: buscar los pisos comunes que tenemos para poder avanzar como sociedad y si no, hay que tratar de buscar otro camino", concede Pinedo. Aunque es Zaffaroni quien salda la discusi贸n: "Lo peor es que los 200 mil abortos se siguen practicando". |