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"Hace 190 años Gran Bretaña invadió las Islas Malvinas y Argentina jamás cesó de reclamar la soberanÃa" | |||
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El 3 de enero de 1833 Gran Bretaña invadió las Islas Malvinas y desde entonces nuestro paÃs no renunció al reclamo por la soberanÃa. Fue el comienzo de una larga conflicto que aún hoy no se resolvió.
Hace 190 años la Argentina ejercÃa plena soberanÃa en las Islas Malvinas. La autoridad militar en el archipiélago era el teniente coronel José Maria Pinedo, quién una vez consumado el acto de despojo fue sometido a proceso de investigación castrense en Buenos Aires.
Su palabra fue de suma importancia para saber conocer el ardid empleado por los ingleses para apropiarse de las islas. En su libro "Los Tratados de Paz por la Guerra de Malvinas. Desocupación y hambre para los argentinos" (Editorial El Copista. 2004) el profesor Julio Carlos González transcribió la declaración completa de Pinedo, la cuál reproducimos parcialmente en esta nota.
Éramos pocos y llegaron los ingleses
El año 1833 se inició con la llegada a Puerto Soledad de la corbeta británica HMS ClÃo. De acuerdo al relato del Comandante José MarÃa Pinedo, la secuencia de acontecimientos comenzó el 2 de enero "A las nueve de la mañana se presentó en el Puerto una Corbeta de Guerra Inglesa a la que fue el Primer Teniente M Majón, y el Médico a visitarla, a quienes le dijo el Comandante de ella que querÃa hablar conmigo y que en el instante que aferrase su velamen pasarÃa a mi bordo; lo esperé."
Continúa Pinedo: "A las 3 de la tarde vino (el jefe inglés) acompañado de dos oficiales, el que bajando a mi Cámara me dijo ser el Comandante de la Corbeta S.M.B. ClÃo que venÃa del RÃo Janeiro acompañado de otra Fragata de lado a tomar posesión de las Islas Malvinas que eran de S.M.B. y que antes de 24 horas tenÃa órdenes terminantes de poner el Pabellón Inglés".
"Al mismo tiempo de tomar (...) y cargar todo lo perteneciente a nosotros y todo conducirlo a Buenos Aires: que estas eran sus órdenes terminantes que las iba a cumplir, que ya en otros puertos de la Isla habÃa estado y dejado el Pabellón Inglés afianzado y que el dÃa de mañana arriase ya el que se hallaba en tierra; entonces le protesté que no podÃa convertirle semejante acto hasta que yo no tuviese órdenes de mi Gobierno, que yo habÃa venido a esta Isla a tomar posesión de ella…"
Siempre siguiendo la declaración de Pinedo, la respuesta del comandante argentino fue: "Protesté, que bajo su palabra de honor me dijese si se habÃa declarado guerra entre la República Argentina y al Gran Bretaña o que motivos habÃa para ello, contestándome, que por su honor me aseguraba de no haber guerra, y que muy al contrario, la amistad y el comercio seguÃa lo mismo, y que extrañaba que yo no tuviese órdenes de mi Gobierno."
Acto seguido, el militar argentino pasó revista a su tropa para comprobar si estaba pronta
para combatir, pero su sorpresa fue mayúscula al comprobar que "Mis oficiales exceptuando uno eran ingleses y toda mi tripulación (...) se alegraba que los ingleses se hicieran dueños de la Isla"
Sus oficiales fueron tajantes y no hicieron lugar para las dudas: "Me contestaron (...) que no podÃan hacer fuego (contra) su Pabellón que si fuera otra Nación, ellos mismos morirÃan todos a mis órdenes primero que ceder en nada; pero que les era muy duro hacer fuego al Pabellón Inglés."
Estas palabras hicieron reflexionar a Pinedo: "Viendo a la Corbeta con fuerzas triple a las mÃas, no tener fuerzas en tierra más que 16 soldados y 9 individuos, y estos 9 sin armas, sin un oficial capaz de hacerlo cargo del destino, y a mi bando contar únicamente con los 14 Soldados y 4 Marineros y 6 muchachos, tener que defender el Buque y la tierra" pensó que lo mejor era rehusar el combate.
Consciente de sus nulas posibilidades en la batalla, Pinedo hizo llegar a los ingleses un mensaje en el cuál explicana que "Yo no podÃa permitirle tomar posesión de las Islas Malvinas hasta no recibir órdenes de mi Gobierno". Los ingleses dejaban pasar el tiempo, que jugaba a su favor, y Pinedo, consciente que su suerte estaba echada, intentó vender cara su derrota.
Contó Pinedo que el 3 de enero de 1833: "A las 6 de la mañana; el Comandante de la Corbeta me protestó que ente ambas Naciones no habÃa guerra, que al contrario, la amistad y el comercio seguÃan como siempre, que creÃa firmemente que habÃa un consentimiento por nuestro Gobierno para ello; pero que sus órdenes eran en el momento de llegar a dichas Islas poner el Pabellón Inglés en ellas como territorio perteneciente a la Gran Bretaña"
En cuánto a "Tropa, habitantes y propiedad de nuestro Estado que hubiese en ella" Pinedo afirmó que los ingleses tenÃan instrucción de "Embarcarlo todo y conducirlo a Buenos Aires, entregándolo al Gobierno y que los habitantes que quisieren voluntariamente quedar, que serÃan respetados ellos y sus propiedades como anteriormente y que él en el momento de cumplir sus órdenes iba a dar la vela para Buenos Aires…"
¿Qué pasó con Pinedo?
Consumado el despojo, a su regreso a Buenos Aires el Teniente Coronel José MarÃa Pinedo, comandante de la Goleta ARA Sarandà fue sometido a proceso a fin de esclarecer su presunta responsabilidad por acciones contrarias al honor militar en su actuación en los acontecimientos del 2 y 3 de enero.
El 7 de marzo de 1833 fue condenado por deficiencias en su actuación frente a la ocupación británica de Malvinas. El ex comandante fue expulsado de la Marina. Sin embargo el juicio fue anulado por irregularidades procesales y después de cuatro meses de inactividad ingresó al Ejército.
(*) Bachiller Universitario en Derecho, periodista de oficio. Nota de opinión del 3 de enero de 2023 exclusiva para Cadena BA.
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