El expresidente Mauricio Macri regresó este martes a la Argentina y deberá presentarse mañana en el juzgado de Dolores para declarar en la causa que investiga el espionaje a familiares de los fallecidos en el submarino ARA San Juan. Sin embargo, todavía no se sabe si efectivamente el exmandatario concurrirá a la citación judicial, dado que sus asesores legales no confirmaron su asistencia.

Por su lado, el abogado de Macri, Pablo Lanusse, se trasladó esta mañana al Juzgado federal de Dolores, a cargo de Martín Bava, para revisar el expediente y se reunirá con el expresidente esta tarde para definir si se presentará en la audiencia o pedirán una nueva postergación de la indagatoria.

Desde el exterior, Macri presentó abogado la semana pasada y apeló su prohibición de salir del país, luego de que el 1° de octubre el juez Bava, subrogante del juzgado de Alejo Ramos Padilla, le prohibiera la salida del país y lo llamara a declaración indagatoria. Ante ello, el exjefe de Estado consiguió que el magistrado aceptara fijar una nueva audiencia para mañana, 20 de octubre.

A pesar de la citación judicial, Macri continuó con su agenda en el exterior, la cual incluyó la presentación su libro en Miami y su viaje a Qatar para cumplir con sus actividades como presidente ejecutivo de la Fundación FIFA. Además, estuvo en Estados Unidos, donde aceptó la propuesta de The Adam Smith Center for Economic Freedom, de la Universidad Internacional de Florida, para dar clases sobre liderazgo.

No obstante, confirmó su voluntad de presentarse a la Justicia, aunque sostuvo que la prohibición de salida del país "carece de todo tipo de fundamentación, y por ende aniquila y vulnera los derechos, principios y garantías de defensa en juicio, debido proceso, mínima intervención estatal, libre circulación y tránsito, principio de inocencia, proporcionalidad y razonabilidad".