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"Reflexión sobre el impacto duradero de los descubrimientos que llevaron al Dr. Luis F. Leloir al Premio Nobel de QuÃmica de 1970" | |||
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La verdadera medida del impacto cientÃfico no depende de cuántas veces se citan artÃculos de investigación o las revistas en las que se informan los trabajos porque el legado de un gran trabajo a veces no se puede evaluar durante muchos años después del descubrimiento inicial. Si el doctor Leloir estuviera vivo hoy, estoy seguro de que se maravillarÃa por el alcance y la profundidad del impacto de su descubrimiento de los nucleótidos azúcares como precursores de la sÃntesis de carbohidratos en la biologÃa y la medicina.
Por su trabajo, sabÃamos que los nucleótidos azúcares servÃan como precursores de la sÃntesis de polisacáridos, pero en las décadas posteriores el campo ha crecido para ayudarnos a comprender la sÃntesis de oligosacáridos en glicoproteÃnas y glicolÃpidos, un tema que toca aspectos clave del ensamblaje de membranas, de la secreción y de la biosÃntesis de las paredes celulares en células procariotas y eucariotas. Hemos aprendido mucho sobre las enfermedades causadas por defectos en la sÃntesis de carbohidratos y el papel crucial de los oligosacáridos en el direccionamiento de proteÃnas dentro de la célula y en la adhesión célula-célula en estados normales y patológicos. Sin duda que el futuro traerá mucho más. Incluso pudo haber anticipado esto en las frases finales de su conferencia Nobel:
"Sin duda, esto puede convertirse en un problema fascinante para futuras investigaciones. Afortunadamente, incluso después de dos décadas, nuestro campo de investigación no se ha vuelto aburrido ni ha pasado de moda".
Aun cuando sobre sus descubrimientos hemos construido en direcciones inesperadas, la devoción singular de Leloir a su trabajo experimental, a los colegas de su instituto y, más ampliamente, a la ciencia latinoamericana, deberÃa servir de modelo para inspirar a la próxima generación de jóvenes investigadores. Su estilo personal, casi ascético, contrasta con el enfoque que busca la aprobación fácil adoptado por aquellos que ponen un énfasis en las aplicaciones prácticas y sus aplicaciones médicas sobre la investigación básica biomédica. El espÃritu de Leloir sigue vivo en aquellos de nosotros cuya motivación principal es la sed de mayor conocimiento de la naturaleza.
(*) Premio Nobel de Medicina 2013 e investigador del Instituto Médico Howard Hughes y de la Universidad de California, en Berkeley, Estados Unidos.
Nota de opinión publicada en Agencia CyTA el 10 de enero de 2021.
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