20-04-2024
"Por una agenda de desarrollo pospandemia que efectivice derechos humanos"
Por Walter Martello (*)  @WalterMartello en D铆a de la Restauraci贸n de la Democracia / D铆a de los Derechos Humanos
Hace 72 a帽os, en momentos en que el mundo a煤n buscaba recuperarse de los efectos devastadores de la guerra m谩s cruenta de la historia, la Asamblea General de las Naciones Unidas adopt贸 la Declaraci贸n Universal de Derechos Humanos (DUDH). Se trata de un documento que proclama derechos inalienables que corresponden a toda persona como ser humano, independientemente de su raza, color, religi贸n, sexo, idioma, opini贸n pol铆tica o de otra 铆ndole, origen nacional o social.

No resulta una mera casualidad que el D铆a de los Derechos Humanos coincida con el aniversario de la reinstauraci贸n del sistema democr谩tico en nuestro pa铆s. Un 10 diciembre, hace 37 a帽os, se le puso fin a la noche m谩s oscura de nuestra historia. La sociedad argentina le dijo Nunca M谩s a un proceso extremadamente autoritario que dej贸 como resultado 30 mil desaparecidos, la violaci贸n flagrante y sistem谩tica de los derechos humanos m谩s elementales; y el aniquilamiento de la matriz econ贸mica y productiva de un pa铆s que supo tener la mayor movilidad social ascendente de todo el continente.

Este 2020, que est谩 llegando a su fin, nos encuentra sumergidos en los efectos negativos de la pandemia covid-19. Por eso la ONU determin贸 que el D铆a de los Derechos Humanos sirva para concientizar sobre la necesidad de "reconstruir para mejorar" 驴Qu茅 significa esta consigna? B谩sicamente que respetar y hacer efectivos los derechos humanos debe ser una prioridad de las pol铆ticas p煤blicas que se pongan en marcha cuando la pandemia deje de apremiar a las sociedades del mundo.

Tenemos la oportunidad de ir hacia un nuevo paradigma que apunte a superar y cerrar brechas sociales. Estamos ante el desaf铆o de generar las bases de un mundo m谩s resiliente, justo y sostenible, para lo cual se deber谩n contemplar preceptos elementales:  

-Erradicaci贸n de cualquier tipo de discriminaci贸n. La crisis del covid-19 se ha visto alimentada por la discriminaci贸n estructural y el racismo. La igualdad y la no discriminaci贸n son requisitos b谩sicos en la reconstrucci贸n.

-Actuaci贸n frente a las desigualdades. Para recuperarnos de la crisis, tambi茅n debemos afrontar la pandemia de la desigualdad. Necesitamos fomentar y proteger los derechos econ贸micos, sociales y culturales. Es decir, urge un nuevo compromiso social para una nueva era.

-Impulsar la participaci贸n y solidaridad. Todos estamos juntos en esto. Desde las personas hasta los gobiernos, desde la sociedad civil y las comunidades de base hasta el sector privado. Todos tienen una funci贸n que desempe帽ar en la construcci贸n de un nuevo mundo tras la pandemia covid-19. Asimismo, es necesario asegurar que las voces de los m谩s afectados y vulnerables informen de las actividades de recuperaci贸n.  路     Impulsar el desarrollo sostenible para las personas y para el planeta. Los derechos humanos, la Agenda 2030 y el Acuerdo de Par铆s son los pilares de una recuperaci贸n que no deja a nadie atr谩s.   

Argentina se encuentra en la regi贸n m谩s desigual del planeta, caracterizada por profundas desigualdades sociales. La pobreza y la pobreza extrema constituyen un problema transversal a todos los Estados de la regi贸n. Solo basta ver y analizar lo que ocurre desde hace d茅cadas con la falta o la precariedad en el acceso al agua potable y al saneamiento; la inseguridad alimentaria, las situaciones de contaminaci贸n ambiental y la falta de viviendas o de h谩bitat adecuado.

Asimismo, no podemos dejar de soslayar el 铆ndice de pobreza en Argentina se elev贸 a niveles alarmantes en el primer semestre de 2020. Hoy 4 de cada 10 argentinos, el 40,9% de la poblaci贸n, es pobre y 1 de cada 10 (10,5%) vive en la indigencia. Antes de la pandemia, la tasa de pobreza hab铆a sido de 35,5% y la indigencia de 8%. En cuanto a los grupos de edad, un 56,3% de las personas entre 0 y 14 a帽os son pobres.

Ante este panorama, es indispensable redefinir estructuras econ贸micas y patrones de comportamiento. Es necesario sentar las bases de una cultura igualitaria que garantice derechos, construya ciudadan铆a y difunda capacidades y oportunidades.

El crecimiento econ贸mico es muy necesario, pero no suficiente. Se requiere m谩s que eso. Es indispensable la redistribuci贸n porque la desigualdad es ineficiente, y resulta imperioso la puesta en marcha de acciones urgentes en m煤ltiples 谩reas relacionadas.

En definitiva, todos los que formamos parte del Estado estamos ante un enorme desaf铆o que implica poner en marcha el crecimiento y, al mismo tiempo, generar las condiciones para hacerlo sostenible e inclusivo. Precisamente, en eso consiste hacer efectivos los derechos humanos.  

(*) Defensor del Pueblo Adjunto de la provincia de Buenos Aires  

Nota de opin贸n del 10 de diciembre de 2020