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02-06-2020 | Economía en tiempos de pandemia | |||
#EnCuarentena | Argentina: la recesi贸n impacta en la producci贸n lechera | |||
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Mientras el mundo sufre la ca铆da del mercado internacional de l谩cteos a causa de la pandemia de coronavirus, en la Argentina, la baja de la demanda interna aumenta la tensi贸n entre los eslabones de la cadena de la leche. En el corto plazo, estas situaciones, sumadas a la probable ocurrencia de excedentes de producci贸n en primavera, hacen prever una reducci贸n en el precio que reciben los tamberos por litro de leche y, por lo tanto, en los m谩rgenes econ贸micos de la actividad. En este marco, Jos茅 Luis Rossi, profesor de la c谩tedra de Producci贸n Lechera de la Facultad de Agronom铆a de la UBA (FAUBA), profundiz贸 sobre el futuro, las fortalezas y debilidades de este importante sector productivo.
"En poco tiempo, la reducci贸n del comercio internacional va a impactar en el precio de la leche. La facturaci贸n de un tambo moderno depende sobre todo de la producci贸n de leche, m谩s all谩 de que se puedan obtener ingresos adicionales por hacer agricultura y vender animales para carne. Por eso, si el precio cae, el margen se achica. Dejar de producir leche significa reducir la facturaci贸n al m铆nimo, y como estrategia general, achicar gastos tampoco resulta saludable ya que tambi茅n termina reduciendo producci贸n e ingreso econ贸mico", explic贸 Rossi.
Para el docente, es probable que el productor ajuste su sistema para hacerlo m谩s eficiente porque sabe que es clave maximizar el retorno por cada peso invertido; pospondr谩 inversiones y descartar谩 del sistema animales improductivos. En los sistemas lecheros, el proceso de producci贸n es tan complejo que el productor que desea continuar en actividad dif铆cilmente decida desarmar su sistema, aun en la presente coyuntura. Pero la pandemia s铆 puede ser un detonante para aquellos que por otras circunstancias -como edad, enfermedades, nivel de endeudamiento u otras razones- no puedan superar la situaci贸n.
"Los n煤meros indican que en marzo 2020 se produjeron 794 millones de litros de leche, un 6,5% m谩s que en marzo 2019. Visto por trimestre, en el primero de 2020, el incremento es del 8,8% contra el mismo trimestre de 2019. Seguramente, la producci贸n acumulada durante el primer semestre de este a帽o va a estar por encima de la obtenida el a帽o pasado. Por lo tanto, la primavera puede encontrarnos con una oferta de leche excesiva si continuamos a este ritmo, en presencia de la contracci贸n actual de la demanda", afirm贸 Jos茅 Luis.
En este sentido, Rossi sostuvo que "la pandemia fren贸 la demanda en restaurantes, en el canal repostero y en hoteles, pizzer铆as y helader铆as; incluso, la ca铆da tal vez sea mayor que la reflejada en las estad铆sticas disponibles ya que el segmento de la mozarela es muy informal. Por lo tanto, los stocks y los costos asociados ya deber铆an estar aumentando. A esto hay que sumar otros aspectos negativos de la crisis como mayores plazos de pago, rotura de la cadena de pago, falta de financiamiento, obligaciones impositivas a cumplir y falta de liquidez".
Por otra parte, aclar贸 que, aunque la cuarentena despert贸 una demanda inusual de leche fluida, con compras firmes de leche, quesos frescos y dulce de leche en mayoristas y supermercados e incrementos en facturaci贸n para autoservicios en abril y mayo de 2020 vs. esos meses de 2019, y que existe un volumen creciente para abastecer planes sociales, es probable que el balance entre oferta y demanda genere excedentes primaverales. "Colocar esta producci贸n adicional significa un desaf铆o para toda la cadena, lo que seguramente reducir谩 el precio que recibe el productor, hoy en $18,43 por litro de leche". Y agreg贸 que seg煤n Dairylando, mantener este precio estanco significar铆a una p茅rdida del 25% en el poder de compra del tambero, considerando que la mayor parte de sus insumos est谩n dolarizados.
Complejidades de la cadena l谩ctea
Rossi coment贸 que la ca铆da de la actividad econ贸mica por la pandemia complica el funcionamiento equilibrado de toda la cadena. "Al ser perecedera, la leche se debe industrializar de inmediato. Por eso el productor necesita una contraparte que la 'procese', un eslab贸n comercial con un canal de distribuci贸n, puntos de venta 'aceitados' y una demanda que traccione toda la cadena. En situaciones 'normales', estos actores responden de forma coordinada, pero como el precio pagado al productor lo determina la industria, el productor lleva las de perder. La pandemia eleva las tensiones ante la presente ca铆da de la demanda".
Y a帽adi贸 que es complejo lograr tal coordinaci贸n entre eslabones de la cadena l谩ctea, a pesar de los grandes esfuerzos del sector productivo. Desarrollar una estrategia sectorial requiere de acuerdos previos dif铆ciles de alcanzar sin metas claras para el largo plazo. "La consecuencia l贸gica es el estancamiento. Tal vez la autocr铆tica sea que la lecher铆a argentina no alcanz贸 un nivel de acuerdo entre los actores que se traduzca en expansi贸n y crecimiento acorde a nuestro potencial por ambiente, por recursos y por capacidad de los individuos que la conforman".
Tambos chicos, tambos grandes
"驴De qu茅 realidad hablamos?", se pregunt贸 ret贸ricamente Rossi antes de profundizar en la preocupante actualidad de los tambos argentinos. "La realidad es la misma para tambos chicos y grandes, cada uno con distintas capacidades de respuesta ante la crisis. Esas respuestas suelen estar definidas por las realidades tranqueras adentro. Mientras los productores empresariales pueden hacer frente a una ca铆da de la demanda, los familiares no".
Seg煤n el docente, en el contexto actual, un productor grande, diversificado en sus actividades y m谩s flexible en opciones, se preocupar谩 por ser m谩s eficiente en el uso de los recursos disponibles. Pueden anticipar decisiones como reducir el rodeo, vender animales para carne o reorientar la agricultura para vender granos. Los productores familiares tienen menos opciones, pero diferente estructura de costos.
"Parecer铆a que esta crisis perjudica m谩s al tambo chico, pero lo que realmente ocurra va a depender de la situaci贸n particular de cada sistema, como cu谩ntos litros produce y a qu茅 costo, con qu茅 eficiencia productiva trabaja, a qui茅n vende la leche, qu茅 precios recibe y con qu茅 plazo cobra. El margen por litro producido puede ser muy bajo seg煤n la combinaci贸n de estos factores. Cuando esto ocurre, una respuesta casi natural para pasar el momento es aumentar la producci贸n. Esa respuesta es nociva para el conjunto de productores porque el aumento de producci贸n deprime el precio, lo que profundiza el problema", advirti贸 Rossi.
Exportar m谩s es improbable en el corto plazo
"En un contexto global de recesi贸n y ante la peor ca铆da del PBI mundial desde 1930, el 煤ltimo informe de Rabobank para el sector muestra que el comercio global de los principales l谩cteos cay贸 un 17%. El bajo precio del petr贸leo y la devaluaci贸n de las monedas van a reducir el comercio mundial, lo que afectar谩 a los pa铆ses importadores, que en el segundo trimestre de 2020 reducir谩n su demanda entre 20 y 30%", puntualiz贸 el docente.
Para Rossi, el impacto de una contracci贸n de la demanda externa como la planteada podr铆a reducirse con una estrategia coordinada entre todos los actores de la cadena l谩ctea, considerando que el 80% de la leche que se produce tiene como destino el mercado interno. No obstante, hay que tener en cuenta que la demanda interna -poco variable entre a帽os- ronda los 200 litros por habitante por a帽o y que en los 煤ltimos meses disminuy贸 el poder de compra de los consumidores.
"En la 煤ltima d茅cada, las exportaciones argentinas de l谩cteos promediaron el 20% de la producci贸n total. El principal producto exportado es la leche entera en polvo, que seg煤n el Global Dairy Trade val铆a 3.331 U$S/tonelada a principio de diciembre pasado y que hoy cay贸 a 2.677 U$S/tonelada. Esto da una idea de la magnitud del efecto pandemia sobre el negocio en general", reflexion贸.
Rumbo al horizonte
En la visi贸n del docente, m谩s all谩 de la gravedad de la situaci贸n social, econ贸mica y sanitaria, la lecher铆a argentina tiene problemas hist贸ricos pendientes de resoluci贸n, que le impiden superar los 10.500 millones de litros anuales. Se trata de tensiones entre los actores de la cadena, falta de acuerdos, pobre coordinaci贸n entre actores, elevada presi贸n fiscal e inexistencia de pol铆ticas sectoriales que van m谩s all谩 de la pandemia de coronavirus.
"Es indiscutible que producci贸n e industria, dos eslabones claves de la cadena, no tienen sentido uno sin el otro. Sin embargo, con la crisis actual se reiteran los problemas por el precio de la leche. Por un lado, este precio define la renta para el productor, pero por el otro, est谩 acordado unilateralmente por las industrias desde una posici贸n dominante, instalando la idea de transferencia de renta en el sector primario", remarc贸.
"Lo cl谩sico para el productor es que siga entregando d铆a a d铆a la leche que produce y que cobrar谩 m谩s adelante a un precio que desconoce. Este precio se plantea por litro de leche, cuando en realidad el valor industrial est谩 en sus componentes. Poder contar con un precio futuro basado en atributos composicionales, transparentar la transacci贸n y encuadrarla dentro del marco legal vigente dar铆a previsibilidad a toda la cadena. Sin resolver estas cuestiones es dif铆cil pensar en una lecher铆a en crecimiento", concluy贸 Jos茅 Luis Rossi. (SLT-FAUBA)
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