Las nuevas disposiciones del gobierno nacional para ampliar el
Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción significan una inversión
equivalente al 3% del producto. Esta medida se suma como una nueva iniciativa
que ratifica su determinación por cuidar del entramado productivo durante esta
crisis sanitaria.
Estas iniciativas están totalmente orientadas a sostener el
aparato productivo nacional y demuestra el compromiso desde el Ministerio de
Desarrollo Productivo Nacional. Las medidas están en perfecta sintonÃa con las
necesidades de las micro, pequeña y medianas empresas, que cuentan ahora con
más herramientas para enfrentar esta crÃtica situación y resistir con
perspectivas auspiciosas hacia el final de este proceso.
Ahora bien, el sistema financiero es realmente una economÃa
irreal y no se encuentra ajena al contexto económico actual. Para que una
sociedad funcione son necesarios ciertos bienes y servicios indispensables que
esté no produce. El sistema financiero podrÃa generar riqueza en la medida en
que participara activamente en el sector productivo del paÃs. En este sentido,
es urgente y necesario una nueva ley democrática de entidades financieras que
signifique dar un paso adelante en el camino hacia un sistema financiero más
justo y equitativo en Argentina, condición fundamental para todo proyecto de
desarrollo económico nacional con inclusión social.
En lÃneas generales, un proyecto que promueva la producción y
no la especulación, que le brinde al sistema financiero argentino un marco
legal más acorde a las necesidades de la industria, el comercio y las economÃas
regionales, universalizando su acceso, incorporando la problemática regional,
en pos de una distribución más equitativa de la actividad financiera a lo largo
del territorio nacional.
Sin embargo, es importante advertir que para modificar la
estructura actual del sistema financiero argentino es necesario avanzar en un
proyecto especÃfico que deberÃa estar acompañado por un paquete de medidas en
el que se incluyeran también la modificación de la Carta Orgánica del Banco
Central de la República Argentina (BCRA) y la creación de una Banca Nacional de
Desarrollo que, en lÃnea con la polÃtica de sintonÃa fina, atienda a las
problemáticas especÃficas de las micro pequeñas y medianas empresas (PYMES),
motor fundamental del crecimiento económico y social del paÃs.
Los bancos y entidades financieras, ante la actual situación,
deben implementar de manera correcta y eficiente la motorización de las
polÃticas de apoyo y sostenimiento a la producción y el trabajo . No podemos
seguir tolerando las especulaciones del sector que más se enriqueció durante el
industricidio de los últimos años. Son nuestras empresas, nuestro patrimonio
nacional y el trabajo de los argentinos los que se ponen nuevamente en riesgo
cada vez que la banca privada ignora la legislación.
No hay más tiempo que perder. Ahora es el momento de las
PYMEs.
(*) Empresario textil. Presidente del Centro estratégico para el crecimiento y desarrollo argentino (Cecreda) y miembro de Came Unida.
Nota de opinión publicada en Agencia Télam el 29/04/2020
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