13-05-2024
21-09-2019 | CRÓNICA ANUNCIADA
Monzó prepara la despedida de Diputados y piensa en un armado “moderado” con dirigentes de Cambiemos
El presidente de la Cámara baja dejará el cargo el 10 de diciembre y, con miras a su futuro político, no descarta un acercamiento a Alberto Fernández, aunque imagina un esquema opositor para definir nuevos liderazgos en 2021. En quiénes piensa.

"Tengo el pase libre. Me costó dos campeonatos sin jugar". Hábil para las metáforas, Emilio Monzó bromea cuando sus colaboradores le preguntan por su futuro político. El presidente de la Cámara de Diputados dejará el próximo 10 de diciembre el cargo y la banca, y ya piensa en un futuro armado opositor "moderado" fuera del poder, que incluye a varios dirigentes de Juntos por el Cambio.

En el Congreso, Monzó se prepara para cumplir con las dos últimas misiones parlamentarias de esta gestión: la aprobación del Presupuesto 2020 y del proyecto de reperfilamiento de la deuda local, ambas iniciativas con origen en Diputados. Son las dos leyes de importancia que deberán votarse en el recinto, aunque la primera recién empezará a negociarse después de las elecciones de octubre.

Mientras tanto, el titular de la Cámara baja encara la despedida. Sabe que, en caso de que se confirme la victoria de Alberto Fernández como presidente, la transición en Diputados no será complicada: su sucesor será su íntimo amigo Sergio Massa, primer candidato de la lista bonaerense del Frente de Todos. Ya hubo algunos tibios contactos entre ambos sobre temas administrativos. Monzó cree que Massa será un hombre importante para el equilibrio de la Cámara.

El actual presidente no suelta prenda, ni en público ni en privado, acerca de un posible acercamiento a Alberto Fernández, quien fuera su profesor de Derecho Penal en la UBA. Ambos mantienen una buena relación e incluso Monzó lo felicitó cuando ganó las PASO. Por ahora, el vínculo no fue más allá de la discreta cordialidad.

Sin embargo, según se supo de fuentes autorizadas, Monzó ya piensa en un armado político en un eventual rol de oposición, donde incluye varias figuras actuales de Juntos por el Cambio. Su idea es generar primero una "masa crítica" de donde luego surjan los liderazgos, pensando en las legislativas 2021. Pone una única condición para participar de ese esquema: que sea "moderado".

¿En quiénes piensa para conformar ese equipo? La primera figura en la mente de Monzó es el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien ganó por amplio margen en las PASO y repetiría el buen desempeño en octubre. "Después del 10 de diciembre, Larreta va a tener un discurso nacional y será una figura relevante", aseguran en el entorno de Monzó. Este jueves, ambos almorzaron en la parrilla porteña El Mirasol y charlaron con la mira puesta en el día después de las elecciones.

Además de Larreta, Monzó tiene muy buen vínculo con Martín Lousteau, diputado y candidato a senador por CABA; y con el gobernador mendocino y futuro diputado Alfredo Cornejo. Los dos dirigentes son números puestos del presidente de la Cámara baja para un equipo que pueda disputar el poder en caso de una derrota en octubre.

En esa lista también figura la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal -con quien supo mantener ciertas discrepancias-, y también Juan Manuel Urtubey, actual compañero de fórmula de Roberto Lavagna. Otro dirigente bajo el radar de Monzó es Pablo Javkin, intendente electo de Rosario.

"Si esto se arma para continuar con la grieta, no cuenten con nosotros", es el mensaje que repite a los líderes del oficialismo el oriundo de Carlos Tejedor, quien desde marzo de 2016 planteó insistentemente, sin éxito, la necesidad de "ampliar la base de sustentación" para reforzar una alianza que nació al calor electoral.

En lo inmediato, Monzó no abandona la idea de formar una consultora política junto a su aliado Nicolás Massot, quien todavía permanece en Estados Unidos por un viaje de estudios. El emprendimiento está "más firme que nunca", sostienen cerca del bonaerense. (parlamentario)