La propuesta de la Gobernadora hace foco en incluir nuevas formas de vandalismo y advierte que ya se han constatado en lo que va del año más de 117 hechos que costarán al menos 100 millones de pesos, más allá de los días sin clase""

"En lo que va del año--acotó el diputado radical--el municipio de La Plata, por ejemplo, lleva gastado más de un millón de pesos mensuales para reparar daños ocasionados por vandalismo de todo tipo en las escuelas platenses. Con ese dinero que se viene gastando este año--continuó--se podrían haber construido tres aulas o haber mejorado diez establecimientos escolares, ponerlos en valor. De eso estamos hablando, más allá de la crueldad e inmoralidad de los actos de esta naturaleza".

Siempre en ese marco, Rovella --quien fuera presidente de la comisión de Educación de la Cámara baja--recordó que "es una obligación estatal proteger al alumno, al docente y a la comunidad educativa en general y asegurar la prestación del servicio educativo, tal cual queda muy claro en el proyecto, tanto en establecimiento públicos como privados.".

"No obstante--dijo--sabemos que los recursos presupuestarios son limitados, y por más dinero que se destine, esos recursos deben utilizarse de manera eficiente para mejorar la calidad educativa, la infraestructura, la alimentación de los chicos, los salarios docentes, y no dilapidarlos en reparar hechos vandálicos que se repiten constantemente".

"El esfuerzo que ha hecho y sigue haciendo la gestión de la gobernadora Vidal en Provincia y el intendente Garro en La Plata para poner en valor los establecimientos escolares, prácticamente abandonados por las anteriores administraciones, por mejorar los salarios docentes, la alimentación de los alumnos, en fin, todo lo que tenga que ver con una educación de calidad, es enorme teniendo en cuenta cómo se recibió la Provincia. 

"Pero ese esfuerzo presupuestario va a resultar insuficiente si no se pone un freno a este tipo de violencias injustificadas, y modificar el código contravencional, es parte de una solución que, en el fondo, tiene que ver con una cuestión cultural, y no con ninguna necesidad material de esos vándalos. No tienen justificación, y tampoco explicación", cerró el legislador radical oriundo de La Plata.