Tras el hallazgo de los restos del submarino ARA San Juan, familiares de los tripulantes recordaron la sugerente frase del presidente Mauricio Macri hace sólo 48 horas, durante el acto en homenaje al cumplirse un año de su desaparición, en el que dejaba entrever que "en días" habría novedades.

"Tengo la profunda esperanza de que esta bandera en días será plantada en el mar, en el recuerdo de nuestros 44 tripulantes que quedarán en la memoria y el corazón de los argentinos para siempre. Ellos sin duda son un ejemplo para todos nosotros de lo que significa servir a la patria", dijo el mandatario, tras el traspaso simbólico de la bandera de guerra del San Juan.

La insignia fue entregada por el cabo segundo Eulogio Ortiz, el submarinista más joven del arma, al comandante de la Fuerza de Submarinos, el capitán de navío Ciro García Repetto, para que quedara en "custodia permanente" hasta que el buque fuera encontrado.

Los familiares, que escucharon las palabras del Presidente y del jefe de la Armada, almirante José Luis Villán, sostuvieron emocionados durante toda la ceremonia las banderas y remeras con las imágenes de los submarinistas desparecidos.

El primer orador del acto fue Juan Aramayo, en representación de los familiares de los tripulantes del submarino, quién leyó un documento en torno a la búsqueda del submarino y reclamó "el compromiso de que nunca se abandonará la búsqueda" del submarino.

El acto comenzó con una misa en la capilla ubicada dentro de la Base Naval, a cargo monseñor Santiago Olivero. Posteriormente se llevó a cabo la lectura del nombre de cada tripulante, pedido que hicieron las familias.

En línea con una antigua tradición naval internacional que simboliza las intenciones pacíficas de una embarcación que se acerca a un puerto, se dispararon luego 17 salvas de cañón, seguidas por el sonido de sirenas de todas las embarcaciones ubicadas en el espejo interior de la base.