20-04-2024
11-10-2018 | Los cimientos del horror
Juicio por Virrey Cevallos
En la casona de la calle Virrey Cevallos 630 funcion贸 durante dos a帽os un Centro de Detenci贸n Clandestino. Los ambientes quedaron impregnados de tortura. La historia de una casa donde se marc贸 a fuego la memoria.
Tras varios intentos de demoler literal y metaf贸ricamente el ex centro clandestino de detenci贸n Virrey Cevallos, lo sucedido en este espacio tendr谩 su esperado proceso judicial. Gracias al trabajo incansable de sobrevivientes y vecinos de la Comuna 1, el 9 de octubre comienzan los juicios orales y p煤blicos por la causa de Virrey Cevallos.


La Casa

Ubicada en pleno centro de la ciudad, la casona de la calle Virrey Cevallos comenz贸 a construirse en 1908 por el comerciante Andr茅s Visca. En 1914 el lote de 8,66 x 20 metros cuadrados qued贸 edificado con la estructura que conserva hasta el d铆a de hoy, pero separada en tres viviendas independientes. A su fallecimiento en 1938,  Andr茅s Visca la leg贸 al Estado junto con otras 46 propiedades para construir la Maternidad del Hospital Policial Churruca. Sin embargo, en 1971 la casa fue rematada y comprada por los hermanos Leonardo y Roberto R铆o.

Los hermanos R铆o eran due帽os del Caf茅 "El Potos铆" en Rivadavia 2101 y decidieron adquirir el inmueble para utilizarlo como dep贸sito del mismo. La vinculaci贸n entre los R铆o y las Fuerzas Armadas a煤n no ha quedado esclarecida.  Si bien el inmueble fue propiedad de la familia hasta 1999, los hermanos R铆o dicen desconocer el uso que se le dio ya que la administraci贸n de 茅sta habr铆a estado en manos de su padre, Eduardo R铆o, quien muri贸 en 1983. Sin embargo, el v铆nculo que une a ambos hermanos con el responsable directo del alquiler de la casa pervive luego del fallecimiento de su padre y deja cabos por atar.

Los R铆o, adem谩s de ser propietarios de la casa de Virrey Cevallos, ten铆an una vivienda en la calle Franklin 931. Este inmueble tambi茅n funcion贸 como c茅lula de trabajo de las Fuerzas Armadas y -aunque a煤n no se ha reconstruido totalmente lo sucedido ah铆 adentro- se sabe que all铆 estuvo secuestrado el periodista y escritor Sergio Bufano.

Seg煤n la agencia de noticias ANCCOM, el Archivo Nacional de la Memoria otorga varias coincidencias entre la casa de Franklin y Virrey Cevallos. El modus operandi ser铆a el mismo, ya que el aparato represivo de la Fuerza A茅rea necesitaba centros clandestinos de detenci贸n (CCD) en la zona de Capital Federal, que operaran como sat茅lites de los centros de mayores dimensiones y que funcionaran como lugares de paso donde comenzar los interrogatorios.

Entre el a帽o 1971 y 1976 se hicieron modificaciones en la casona de la calle Virrey Cevallos. Se agreg贸 un port贸n de acceso vehicular y un entrepiso que une las tres viviendas -entre otras modificaciones internas-, lo que permite pensar que estaba siendo adecuada para la funci贸n que tendr铆a posteriormente.

Seg煤n los testimonios de vecinos y sobrevivientes, se estima que la casa funcion贸 como centro de detenci贸n clandestino entre 1976 y 1978. En ella accion贸 la Regional de Inteligencia de Buenos Aires (RIBA) -que en un momento funcion贸 en la S茅ptima Brigada A茅rea- y la Polic铆a Federal Argentina.

Aunque la mayor铆a de los detenidos estaban tabicados -constantemente vendados-, los recuerdos f铆sicos y los datos aportados por vecinos permitieron reconstruir la disposici贸n del centro. En la planta baja funcion贸 la sala de interrogatorios donde los detenidos eran sometidos a preguntas registradas con una m谩quina de escribir. M谩s atr谩s, en el ambiente alargado del fondo de la planta baja, funcion贸 la sala de torturas donde estaba la cama met谩lica o "parrilla", que se utilizaba para pasar electricidad por el cuerpo a los detenidos. Osvaldo L贸pez, quien pas贸 ocho d铆as cautivo en el centro de detenci贸n Virrey Cevallos antes de darse a la fuga, recuerda: "Ellos siempre tra铆an gente que torturaban y pon铆an la m煤sica fuerte para que no se escucharan los gritos. Inclusive tra铆an perros grandes a la noche".

En el primer y segundo nivel del contrafrente funcionaron las celdas de los secuestrados, peque帽os ambientes sin ventilaci贸n que hab铆an sido pensados como cuartos de servidumbre a principios del siglo XX. En el entrepiso, que da al frente de la calle Virrey Cevallos y que conecta los tres cuerpos de la casa, funcionaron las oficinas de inteligencia. Seg煤n los vecinos, por las ventanas que daban a la calle se pod铆an distinguir personas armadas.  Se cree que en el recodo de la parte izquierda funcion贸 un cuarto de vigilancia desde donde se controlaba la seguridad de quienes entraban y sal铆an.

Miriam Lewin ten铆a 19 a帽os el 17 de mayo de 1977, d铆a en que la secuestraron y la llevaron a la comisar铆a N潞 44  y de ah铆 a Virrey Cevallos 632, donde pas贸 diez meses y medio. Posteriormente fue trasladada a la Escuela de Mec谩nica de la Armada (ESMA) hasta enero de 1979. De acuerdo a su testimonio, en el primer piso funcion贸 el comedor de los represores. Durante su cautiverio, en una ocasi贸n, Lewin fue obligada a lavar los platos reconociendo el logo de la Fuerza A茅rea en la vajilla.

La metodolog铆a adoptada en Virrey Cevallos consist铆a en torturar a los secuestrados minutos despu茅s de su detenci贸n. El objetivo era  lograr que "canten", o sea, obtener "informaci贸n fresca" acerca del paradero de sus compa帽eros de militancia y otras cuestiones. Posteriormente, muchos detenidos eran derivados a otros centros de detenci贸n m谩s lejanos o dejados en libertad.


La recuperaci贸n como Espacio de Memoria

Una vez restablecida la democracia en los 80, la casona funcion贸 como hotel de familias e inquilinato. La gran cantidad de gente que convivi贸 ah铆 en condiciones precarias  gener贸 un mayor deterioro de las instalaciones.

No fue f谩cil la identificaci贸n del lugar debido a los pocos sobrevivientes, muchos de los cuales no reconoc铆an los espacios donde hab铆an estado secuestrados. Lewin recuerda: "Cuando voy a la CONADEP ("Comisi贸n Nacional Sobre la Desaparici贸n de Personas") no ubico la casa. Yo pensaba que la hab铆an demolido, ya que cuando me trasladan a la ESMA los milicos me dicen que me mandaban a otro lado porque ten铆an que demoler la casa por un ensanchamiento en la Av. 9 de Julio. Entonces, cre铆a que hab铆a estado en la cuadra del teatro Margarita Xirg煤, donde hay una casa demolida y ten铆a las caracter铆sticas arquitect贸nicas de Cevallos. Siempre llegaba a la zona de la casa, pero nunca pod铆a dar con la edificaci贸n exacta".

A mediados del a帽o 1977, Fernando Gurbanov reconoci贸 a uno de los integrantes del Grupo de Tareas que hab铆a secuestrado a su hermano, Carlos Gurvanov, meses atr谩s. Al seguirlo, pudo verlo entrar a la casona de Virrey Cevallos al 630. Gracias a este hecho, junto con datos que le dio Carlos - que se encontraba exiliado en M茅xico-, Fernando  dedujo que ese era el lugar donde su hermano hab铆a estado secuestrado.

En 1996, Mar铆a del Carmen Castro, militante en los a帽os '70 del "Partido Revolucionario de los Trabajadores" (PRT), se enter贸 que la casona se encontraba en venta por la inmobiliaria Enricci Propiedades. Junto con Esther Pastorino y Lili Santochi, integrantes de la agrupaci贸n "Vecinos de San Crist贸bal por la Memoria", intentaron frenar la venta y demolici贸n del inmueble y demandaron su reconocimiento legal como Centro Clandestino de Detenci贸n. Con este fin, se organiz贸 un escrache el 22 de julio de 2003 al cual concurrieron diversos medios de comunicaci贸n.

Finalmente, en 2004 la labor de "Vecinos de San Crist贸bal por la Memoria" dio sus frutos. Luego de visitar varias veces el juzgado y, tras distintos intentos fallidos, el 9 de septiembre la Legislatura porte帽a aprob贸 por 34 votos a favor, 3 en contra y 1 abstenci贸n la expropiaci贸n del ex CCDTyE "Virrey Cevallos" y en abril del 2007, el "Instituto Espacio para la Memoria" (IEM) recibi贸 del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires la tenencia del inmueble. Es a partir de entonces que el IEM, junto a vecinos del barrio, emprenden la restauraci贸n edilicia de este sitio para llevar adelante un proyecto de recuperaci贸n de la memoria hist贸rica. Para ello se cont贸 con un grupo de restauradores, conservadores e investigadores que trabajaron de conjunto con los sobrevivientes y vecinos para reconstruir los hechos a partir de sus testimonios. Los espacios de la casa que fueron reconocidos por sobrevivientes no fueron modificados. Actualmente la casa funciona como centro de la memoria donde se realizan diferentes actividades culturales y puede ser visitada de lunes a viernes entre las 10 y las 16 horas. (GdS)