El partido arrancó bien para el argentino, que pudo tomar el primer game de saque del japonés y sacar una buena ventaja rápidamente. Sin embargo, la debacle del primer set comenzó cuando el Peque sirvió 4-2 y no lo pudo sostener. A partir de allí, Nishikori creció en juego y en confianza, y se terminó imponiendo por 6-4.

El segundo parcial fue muy disputado, pero Schwartzman volvió a fallar en un momento decisivo. En el 4-4, el asiático se quedó con el saque de Diego y con su servició sentenció la segunda manga.

Todo parecía indicar que el Nishikori iba camino a ganar el match en tres sets. Sin embargo, el argentino sacó a relucir su temple y luchando, cuando el asiático sacó 6-5, le quebró y se hizo del tercer parcial.

Pero en ese tercer set el Peque dejó toda su energía y el cuarto lo arrancó cediendo su saque. Desde ahí todo se hizo cuesta arriba para el argentino y el japonés aprovechó a la perfección cada oportunidad que el partido le presentó. En 33 minutos, Nishikori sentenció un contundente 6-1 y terminó con las esperanzas del Schwartzman.

Diego, que era el penúltimo argentino que quedaba en el Grand Slam norteamericano, no pudo defender los puntos que había cosechado el año pasado, cuando alcanzó los cuartos de final, y seguramente eso lo sentirá en el ranking.