La intelectual liberal Antonella Marty aseguró que la disolución por decreto de la Asamblea Nacional Legislativa y su reemplazo por la Asamblea Constituyente organizada por el gobierno en Venezuela forma parte de "un plan de la dictadura para perpetuarse en el poder", con estrategias sugeridas por autoridades del régimen cubano, que tienen "intervenido hace rato el país".

La analista, que es autora del libro "La dictadura intelectual populista", consideró que el gobierno de Nicolás Maduro "es la continuación de un plan que comenzó con Hugo Chávez con el intento de golpe de Estado contra Carlos Andrés Pérez" y tras provocar una crisis "llega al poder por vía democrática y empieza a desintegrar las instituciones del país".

"Chávez le cambió el nombre al país, cambió la bandera, modificó las instituciones, avanzó sobre la propiedad privada, comenzó las persecuciones y acordó la infiltración de Cuba y de Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia con el narcotráfico en el Estado. Por eso hoy, cuando disuelven el parlamento e imponen la Constituyente de ellos, es parte de la continuidad de un proceso", explicó Marty, en declaraciones al programa "No es lo que parece", que se emite los sábados de 9 a 13 por radio Plus de La Plata.

Puntualizó que la intervención de la dictadura de los Castro en Venezuela "está probada con documentos y está abiertamente formalizado, al punto que los actos civiles y patrios en Venezuela se hacen con las dos banderas, la creada por Chávez y la de Cuba, para que el pueblo sepa quién los gobierna".

Marty consideró parte de las "estrategias maquiavélicas cubanas aplicadas en Venezuela" las elecciones regionales en algunos estados que autoriza el gobierno de Maduro, ya que el régimen "tiene el control del Consejo Nacional Electoral y digitan todo, dicen qué elecciones perder y cuáles no para controlar y simular un estado de derecho que no hay".

Al respecto, explicó que "tras la elección de la constituyente, muchos partidos que convergen en la Mesa de Unidad Democrática le siguieron el juego al gobierno aceptando participar de elecciones regionales en la Mesa de Elecciones Regionales, pero ya  fuerzas como la de María Corina Machado se abrieron porque ven cómo el Consejo Electoral digita todo y ven las intenciones del régimen, que es lograr oxígeno para profundizar la dictadura".

"No es una salida participar de elecciones regionales, porque en Venezuela el régimen decide cuáles elecciones se ganan y se pierden. Siguen el plan de estrategias maquiavélicas de la dictadura más larga de América Latina, que es el régimen cubano, que están en el poder desde 1959. Por algo la cúpula del poder fue infiltrada hace rato por el G2 cubano y el Ejército está infiltrado por las FARC para perpetuarse con violencia y anulando el estado de derecho", agregó la analista.

Como Pablo Escobar

A su juicio, la disolución del parlamento es "una mera formalidad de la dictadura para consumar un plan que es la continuación de lo iniciado por Chávez, la diferencia es que ahora el mundo lo ve distinto porque se acabaron los gobiernos del denominado socialismo del siglo XXI, que eran populistas que se callaban o aplaudían esas barbaridades".

Agregó que, "sin elecciones, sin instituciones, sin parlamento, ya no hay posibilidad de diálogo con Maduro porque no quieren dejar el poder y hacen cualquier cosa, es como querer dialogar en su momento con Pablo Escobar, él quería impunidad y violencia y punto".

Por esto, remarcó que "la única salida para frenar los atropellos que todos los días vemos en Venezuela, con asesinatos a manos de las fuerzas policiales, con represión y la anulación de las instituciones como parte de un plan de dictadura, es que Maduro deje el poder", aunque esto es "difícil porque la cúpula la maneja Diosdado Cabello como armador de todo, quien es mandado directamente desde La Habana".

Sobre la posible intervención armada del EE.UU en Venezuela, Marty dijo que si bien "es factible", no es fácil de pensar  y a su vez traería consecuencias regionales "impredecibles", porque muchos gobiernos "usarían la entrada de EE.UU como pretexto para culpar a los norteamericanos de todos los males".