24-04-2024
"Oportunidades de una polarizaci贸n audaz"
Por Virginia G贸mez  @mavirginiagomez

Hace unos d铆as el polit贸logo Andr茅s Malamud twitteaba que en este pa铆s con ajuste y represi贸n no se gobierna. Tal vez esa sea la s铆ntesis de lo que supuestamente ocurre pos2001, donde la poblaci贸n, en particular las clases medias estafadas por los bancos y los desocupados, le pusieron un l铆mite a este r茅gimen social y tiraron abajo a un Gobierno. Causaron una crisis tal que en pocos d铆as vimos una sucesi贸n de presidentes.

El primer perdedor, fue el partido radical, que se hundi贸 como expresi贸n pol铆tica de los sectores medios. En dos d铆as, un partido centenario se desintegr贸. Pero al PJ le cost贸 un Duhalde, suplantado por el kirchnerismo. N茅stor Kirchner intent贸 con Cobos y los movimientos sociales ensayar un proyecto de partido transversal, pero la crisis del campo se lo impidi贸. Una disputa entre sectores de las clases dominantes, le dijo: "mi voto es no positivo".

Ese fantasma del 2001 sobrevuela a los restos del radicalismo, que respiran dentro de Cambiemos; y al interior del PJ, que en verdad quisieran volver al bipartidismo del p茅ndulo en el r茅gimen y no depender del 30% que s贸lo consigue CFK.

Pero no solo los partidos tradicionales de la Argentina a煤n temen volver a aquella pesadilla, donde reinaba el clima asambleario. La dirigencia peronista y burocratizada de los sindicatos, pag贸 el costo del 2001, con el proceso conocido como "sindicalismo de base" que se inici贸 apenas se recompuso la econom铆a por los vientos de cola que ven铆an desde el plano internacional. Una nueva generaci贸n de trabajadores que ten铆a aspiraciones, y para cumplirlas ve铆a en sus delegados un obst谩culo.

Pero desde el 2014 que los trabajadores empezaron a perder poder adquisitivo, empez贸 la ruptura pol铆tica con el kirchnerismo. Ca铆da del salario real que se repiti贸 en el 2016, con el Gobierno de Macri que ataca las condiciones de vida de incluso un sector que lo vot贸 en el balotaje para que pudiese llegar a la Casa Rosada.

Estamos a pocos meses de las elecciones de medio t茅rmino. Con los docentes en el medio del campo de batalla, el Gobierno convirti贸 su estrategia electoral en una forma de gobernar. Polariza para fidelizar a su base del 30%. Act煤a como oposici贸n, cuando gobierna. Una minor铆a intensa, sin vocaci贸n hegem贸nica, que no est谩 apoyada en los sindicatos y un partido como el peronista, pero que cuenta con el visto bueno de un sector importante de la burgues铆a concentrada ligada al agro y el mercado externo.

A su favor juegan los kirchneristas que desde sus bancas o sindicatos partidizan las luchas que podr铆an pararle la mano al Gobierno. All铆 la 煤nica estrategia es desgastar, contener para poder volver, y aceptar el liderazgo en las urnas de Cristina Fern谩ndez.

La contundencia del paro general del 6 de abril y de los docentes a nivel nacional del martes 11, le ponen un l铆mite al Gobierno, aunque parece dispuesto a cruzarlo a diario. La represi贸n en la Panamericana y en el Congreso lo demuestran.

Ante esta situaci贸n los trabajadores y estudiantes que militan por una alternativa independiente desde el Frente de Izquierda, tienen la oportunidad de mostrar un camino para enfrentar el ajuste que quieren que pase con represi贸n. Pero para eso hace falta m谩s audacia de la que tiene el Gobierno, y romper la contenci贸n peronista.  

Virginia G贸mez. Exclusivo para Cadena BA. 12/04/2017
Licenciada en Ciencia Pol铆tica (UBA). Docente. Staff de "La Izquierda Diario"