Comienza la segunda semana de paro docente. La anterior, no iniciaron las clases las maestras de primaria, este lunes no comenzarán en secundaria, y en los institutos terciarios se reprograman las fechas de exámenes finales. La medida tiene un alto acatamiento.

A 15 meses del gobierno de Mauricio Macri, Cambiemos decidió decidió emprender una guerra contra los docentes. El viernes ofreció un irrisorio 19% en tres cuotas (que se terminarían de cobrar con el sueldo de enero 2018), en el marco de la negociación paritaria. Amenza con dictar la conciliación obligatoria, descontar los días de paros, y en vez de dar una solución al conflicto, acusa a la docencia de perseguir fines políticos.

El marco es de ajuste. Despidos y suspensiones en la industria, tarifazos, posibles aumentos del transporte público. Un malestar creciente, que incluso se expresó, con internas mediante, en la movilización de la CGT, donde quedó a las claras la tregua de la dirigencia sindical con el Gobierno.

Pero Cambiemos está decidido a intentar torcerle el brazo a la docencia, lo que posibilitaría aplicar su plan de ajuste a otros trabajadores, y generalizar a otros gremios el techo paritario.

Macri, desgastado por las medidas económicas y las crisis por casos de corrupción, no puede encabezar la batalla, por eso decidió, poner al frente a María Eugenia Vidal, que comenzó el conflicto con una alta imagen positiva y este año no es candidata en las elecciones de medio término. Una jugada audaz, donde Cambiemos puede perder en pocos meses el capital político de la gobernadora.

El lunes 13 habrá paro provincial convocado (por televisión) por el Suteba provincial que dirige Baradel. Desde las seccionales dirigidas por la oposición proponen continuar el paro el martes 14 y exigen asambleas comunes de los docentes de distintos gremios (son 6 en la provincia de Buenos Aires) y no afiliados para resolver un plan de lucha y organizar con fuerza los paros desde las escuelas, como las jornadas con la comunidad. Los días miércoles 15 y jueves 16, el paro docente será nacional, convocado por la CTERA y se espera la convocatoria a una Marcha Federal Educativa.

El gobierno se juega al desgaste, usando a su favor las divisiones entre los gremios que muchas veces genera confusión en las escuelas por los métodos antidemocráticos de decisión sobre las medidas, y la desconfianza de amplios sectores de la docencia en Baradel.

Sólo un plenario provincial de delegados con mandatos por escuela, puede unir lo que Macri y Vidal quieren dividir, y organizar la bronca contra el Gobierno para ganar esta lucha. Desde allí, la docencia tendria mas fuerza para imponer el paro general a las todas las centrales sindicales, y romper la tregua. Esas son las condiciones que posibilitarían romper el techo salarial, conquistar el 35% que exigen los sindicatos del Frente Gremial, y transformar las conquistas de los docentes en un punto de apoyo para todos los trabajadores contra el ajuste.