26-04-2024
15-12-2016 | Desde Periodismo de la UNLP
Rubén Dri: “la lucha es por una sociedad liberada, donde los sujetos puedan reconocerse con todos sus derechos”
Así lo dijo el filósofo y fundador de la Teología de la Liberación al recibir el Doctorado Honoris Causa de la UNLP.
Este martes 13, en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social, la Universidad Nacional de La Plata, otorgó el Doctorado Honoris Causa al destacado filósofo y fundador de la Teología de la Liberación, a propuesta de la facultad anfitriona y la Facultad de Trabajo Social.

Allí estuvieron presentes la decana de la Facultad de Periodismo, Florencia Saintout; la decana de Trabajo Social, Alejandra Wagner; la vicepresidenta del área académica de la UNLP, Ana Barletta que hicieron entrega del título honorífico en compañía de autoridades de la universidad, de distintas unidades académicas, de estudiantes, docentes y referentes de derechos humanos, de movimientos cristianos, académicos, políticos, sociales y culturales.

Luego de un emotivo acto, Rubén Dri, compartió una conferencia magistral titulada "La construcción del poder popular en la coyuntura actual de nuestra Patria", en la que reflexionó en torno a la conformación del sujeto, la construcción de poder y el reconocimiento del otro sujeto como tal.

"De 1945 a 1955 el movimiento popular, con el liderazgo de Perón y el acompañamiento de Evita, se recuperó de la derrota sufrida desde 1862 en la batalla de Pavón, y constituyéndose como un sujeto multitudinario, o sea como un pueblo, fue construyendo un país socialmente justo, económicamente libre y políticamente soberano", dijo al comienzo de la conferencia el filósofo y teólogo que analizó el camino que recorrió el movimiento nacional desde ese momento hasta el 2003 con la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia.

"Supo Perón que esa construcción no era posible si el movimiento se restringía a los límites de la patria chica, como lo habían visto líderes fundamentales de la gesta de la independencia como Artigas, San Martín y Bolívar. Menester era ampliar el proyecto libertario al espacio de la Patria Grande latinoamericana" destacó el conferencista.

"2001 fue el año en que se cristalizó el colapso que se venía anunciando: el pueblo en la calle, desorientado, poniendo el cuerpo, rechazando visceralmente todo el sistema y con ello, también la política. 2003 es el momento en que, a partir de la elección de Néstor Kirchner, comienza la recuperación del movimiento, o sea, de la política popular", agregó.

Según Dri, en "esos días que entretejen el espacio que va del 2001 al 2003 que se vuelve a discutir con pasión el tema del poder: era el pueblo organizado en asambleas de todo tipo frente al neoliberalismo, eran los mismos problemas a los que hoy se enfrenta el movimiento popular, los mismos pero diferentes".

En este sentido, expresó que "el sujeto no puede ser pensado escindido del poder; son dos momentos de la realidad siempre fluyente que es el sujeto" y afirmó que "el sujeto es movimiento". "El sujeto no tiene movimiento, sino que es movimiento, es el moverse continuamente, el continuo hacerse sujeto", completó.
 
En ese movimiento, explicó, el sujeto siempre se pierde y, para volver a ser sujeto debe volver a encontrarse. "Ello no es posible sin relatarse. Nosotros continuamente nos relatamos a nosotros mismo. En esto radica el problema de la memoria: sin memoria no hay sujeto, y esto se aplica tanto al sujeto individual como al sujeto colectivo", manifestó.
 
El filosofo definió a la memoria como una "constitución ontológica del sujeto y no como un rasgo meramente psicológico", y consideró que "todo proyecto de dominación, que es al mismo tiempo proyecto de objetualización de los sujetos dominados, siempre trata de hacer desaparecer la memoria del vencido, el cual es necesario que pierda su propia historia y adopte la historia del vencedor. Los vencidos no tienen historia, no pueden tenerla, porque si la recuperan se recuperan a sí mismos y el proyecto de dominación entra en pánico".
 
"Para el proyecto neoliberal que encarna el macrismo, es necesario que el pueblo aborrezca y olvide sus mejores 12 años de la actual etapa democrática, así como la fusiladora del 55' vio que era necesario que el pueblo olvidara y repudiara los mejores 10 años de su historia independiente", ejemplificó.
 
Luego, Rubén Dri explicó que nadie puede crear un sujeto y que el único que puede crear un sujeto es el mismo sujeto, hay un "movimiento de autocrearse" y "si es creado por otro, es creado como objeto no como sujeto".
 
El conferencista continuó profundizando: "El desocupado al que la sociedad ha tirado fuera de los límites del espacio social, tornándolo invisible, se para en medio de la calle y la corta; en ese movimiento de cortar la calle se ha puesto como sujeto. No adquirió poder como algo que se le agregó o como algo venido desde fuera, sino que fue el movimiento de subjetualizarse, el movimiento de empoderarse".
 
Por otro lado, sostuvo que ningún sujeto puede "entrar o salir" del poder, sino que "el poder se adquiere con el movimiento de subjetualizarse, el movimiento del empoderarse"

Y agregó: "En consecuencia, el problema no es si entramos o no en el poder, sino qué tipo de poder, o sea de sujetos, queremos ser: si sujeto dominador, esclavizador, manipulador o sujeto servicial, si sujeto de obediencia o sujeto de diálogo".
 
"Sin poder no se puede transformar nada absolutamente. El sujeto es poder en la medida en que es sujeto y, en consecuencia, avanzar en el proceso de subjetualización, de ser mejor sujeto, es avanzar en la construcción de poder", añadió Dri, y dijo que el único poder que puede solucionar todos los problemas que se le presentan a la sociedad "es el poder que surge de abajo, el poder popular".
 
En este sentido agregó, "el sujeto es un ensamble de relaciones. Transformar una sociedad es transformar sus relaciones, revolucionar una sociedad es revolucionar sus relaciones". 
 
También analizó el movimiento dialéctico de "reconocer y ser reconocido": "El sujeto aislado constituyéndose a sí mismo no existe, siempre se desarrolló en comunidad; el ser con otros que expresa esa realidad comunitaria es constitutivo del sujeto porque es el ámbito del mutuo reconocimiento" y ejemplificó: "Es maravilloso ver cómo el ser humano, el sujeto va despertándose  como quien viene de un sueño, mediante la comunicación con los seres que lo rodean. En esa comunicación va reconociendo y siendo reconocido. Comunicación que es lucha por el reconocimiento y ya no para más".
 
Dri, manifestó que no hay reconocimiento posible en las relaciones de dominación y que "el  camino del amo, del dominador, es un callejón sin salida para la realización del sujeto". También  vinculó  la cuestión de las luchas por la liberación con las luchas por el reconocimiento y desplegó una serie de reconocimientos específicos como fundamentales. "Reconocimiento económico en primer lugar, es decir reconocimiento del derecho efectivo al trabajo mediante el cual el sujeto se crea sí mismo, creando sus propias condiciones de vida. El trabajo no es sólo el medio a través del cual se crean los productos necesarios para la vida, sino que son al mismo tiempo la autocreación del sujeto que se crea, creando. Reconocimiento social, superación de la estigmatización  del cabecita negra, la chusma, el indio, la grasa militante, el bolita, el paragua; y aquí el ejemplo de Milagro Sala, la coya, la negra, que se atrevió con toda dignidad a recrear una comunidad, y que se la quiere presa para que no sea ejemplo de una recuperación formidable. También el reconocimiento político, construcción de poder popular que enfrenta las contradicciones que se presentan: micropoderes con los macropoderes, y la social con lo político. Reconocimiento cultural, construcción y dialogo de  las múltiples culturas que forman parte del pueblo argentino y latinoamericano", sostuvo.
 
Para concluir, Rubén Dri afirmó que "la lucha es por una sociedad liberada, donde los sujetos puedan reconocerse con todos sus derechos".  Y retomó el discurso del 1 de mayo de 1974 en donde Perón dijo "nadie puede realizarse en un país que no se realiza,  de la misma manera que a nivel continental, ningún país podrá realizarse en un continente que no se realiza" y cerró expresando "Chávez, Néstor y Fidel no están muertos, están presentes como fermento y acicate de las nuevas luchas por el logro de un continente realizado".