El candidato explicó, "en nuestro plan de obras tenemos previsto una gran inversión en la periferia de la ciudad, porque nuestra voluntad es incluir y equilibrar la forma en la que se distribuyen los recursos", y agregó, "con nosotros, habrá 100% de cloacas y agua potable, nuevos accesos, un sistema de transporte público que nos integre a todos, un plan de viviendas que nos permita garantizar ese derecho y reorganizar la ciudad".

Carlotto, se refirió al desequilibrio que existe en La Plata entre el casco céntrico y la periferia de la ciudad, y consideró, "el gobierno municipal rechaza el crecimiento, porque sumerge en el abandono a las regiones pobladas recientemente; y no tiene vocación por incluir, porque mantiene a la zonas mas empobrecidas en la marginalidad y la carencia de todos los servicios. Mientras la Nación y la Provincia incluyen, la municipalidad de La Plata discrimina y excluye".

El Senador provincial, se refirió a la situación que viven los vecinos de Barrio Nuevo y Villa Esperanza. Al respecto, dijo, "es inaceptable que con todo lo que creció la Argentina, con todo lo que se invirtió en la provincia de Buenos Aires, y con las ventajas objetivas que tiene esta ciudad, tengamos barrios en semejante estado de abandono".

Barrio Nuevo

525 y 209 después de la lluvia es una zona inaccesible en vehículo. Desde 209 hasta 214, los vecinos se quejan porque no llegan las ambulancias, no cuentan con recolección de residuos ni alumbrado público, no llegan los taxis ni pasan patrulleros. No hay veredas, las calles son huellas de barro y los canales con agua servida se desbordan.

Raquel, cuenta que tienen que caminar varias cuadras para dejar la basura, y allí tampoco hay contenedores, "cuando llueve no pueden entrar ambulancias, y la policía no pasa nunca. Tampoco tenemos alumbrado público, a la noche no se ve nada", afirma.

Villa Esperanza

En 516 y 214, la tormenta dejó barro y agua servida en toda la calle. Ahí, los canales están al descubierto y cuando rebalsan el agua ingresa en el patio de los vecinos. Adela, asegura que hasta ahí "tampoco llegan las ambulancias, y acá viven muchos chicos, muchos con asma o problemas respiratorios. Tampoco tenemos alumbrado público, y todo está lleno de basura porque no hay recolección".

Rubén Moncheto, explicó, "en Villa Esperanza el agua la bombean de un pozo, pero nos mostró que a sólo unos cuantos metros, hay enormes lagunas con agua servida, donde debería funcionar una planta de bombeo y depuración, de manera que la salubridad del agua de pozo resulta al menos, dudosa".