Gales se clasificó a las semifinales del Mundial de rugby por segunda vez en su historia, al derrotar a Irlanda por 22-10, después de haber llegado a esa instancia en la primera edición del torneo, en 1987, también en Nueva Zelanda. 

Irlanda había dado la sorpresa en la primera fase al vencer a Australia (15-6), perdió una buena oportunidad de haber alcanzado por primera vez en su historia las semifinales al caer ante un equipo de Gales que se medirá en la siguiente ronda ante Francia. 

Un try en el inicio del partido del wing Shane Williams y dos en el segundo tiempo del medio-scrum Mike Phillips y del centro Jonathan Davies, en un marcador que completó el pie del apertura Rhys Priestland, con dos conversiones, y el fullback Leigh Halfpenny, con un penal. 

Irlanda se había ido al descanso perdiendo 10-3, pero logró llegar a empatar al inicio del segundo tiempo, gracias a un try del wing Keith Earls, más la conversión de Ronan O'Gara, pero a partir de ese momento, Gales fue un vendaval. 

Gales había terminado la primera fase como segunda del grupo D, con una derrota inicial ante la campeona mundial Sudáfrica (17-16) y tres victorias después sobre Samoa (17-10), Namibia (81-7) y Fiji (66-0). 

Para los irlandeses, este revés supone un duro golpe, ya que el equipo tenía altas expectativas después del éxito de la primera fase sobre los Wallabies. La generación de Brian O'Driscoll, Ronan O'Gara, Paul O'Connell y Donncha O'Callaghan pierde así su última oportunidad de conseguir un éxito en un Mundial y se quedará con el título del Seis Naciones de 2009 como mayor logro.