Tras la una reunión de gabinete ampliado de las administraciones nacional y provincial que encabezó con la gobernadora  bonaerense, María Eugenia Vidal, en  el Cultural Kirchner (CCK), el presidente de la Nación,  Mauricio Macri, dijo que heredaron del gobierno anterior "un Estado desmantelado y lleno de corrupción"

"El punto de partida fue más duro de lo que esperábamos. Encontramos un Estado desmantelado, desquiciado, sin planeamiento, cargado de corrupción e improvisación. Por esto, en su momento les dije (a los ministros y colaboradores) que no se abrumaran, porque es lo peor que podemos hacer", afirmó Macri en una conferencia de prensa brindada junto a Vidal.

Por esto, remarcó que los primeros cuatro meses de gobierno "fueron duros", porque hubo que sanear el Estado, sincerar las tarifas, liberar los controles sobre el tipo de cambio y las operaciones de comercio exterior y finalmente acordar con los acreedores externos para salir del default y volver al mercado de créditos.

Después de todo esto, "estamos trabajando para salir del flagelo de la inflación, el impuesto más perverso que pagan los más pobres, es una estafa que hace el gobernante a la gente que le creyó. Estamos encarando este problema y en el segundo semestre se van a empezar a ver resultados claros", agregó Macri.

Por otra parte, el mandatario pidió a los ministros y miembros de ambos gabinetes "no responder las agresiones", pues "no tenemos que engancharnos en la agresión, porque perdemos la energía en el foco de lo que tenemos que hacer, que es mucho".

Por último, se mostró optimista de que a partir de la segunda parte del año se estabilizará y se recuperará la economía y convocó a mejorar la provisión de combustible.