El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, rompió el silencio al que se llamó luego de verse forzado a declinar su postulación a la presidencia de la Nación, defendiendo su decisión de no aceptar la oferta de la jefa de Estado, Cristina Fernández de Kirchner, porque cumplió con "la palabra empeñada" de no negociar su aspiración principal y además adelantó que no integrará el gabinete del próximo gobierno nacional a partir del 10 de diciembre, si gana Daniel Scioli.

"Hicimos lo mismo que dijimos desde el primer día. Ustedes me escucharon decir que iba a cumplir con la palabra empeñada y que pretendía competir en las Primarias presidenciales del Frente para la Victoria. Era una posibilidad y si no se daba, iba a cumplir con mi responsabilidad hasta el 10 de diciembre. Y así fue; cumplí con lo que dije. Tengo palabra", afirmó Randazzo al encabezar un acto en el puerto de Buenos Aires.

El funcionario puntualizó que por haber sido diputado, ministro provincial y nacional entiende "las reglas de juego" en la política, por lo cual declinó su postulación consciente de que si la mantenía enfrentaba a la presidenta, porque Scioli tenía como vice al secretario legal y técnico de la Nación, Carlos Zannini, mano derecha de la jefa de estado.

Además, rechazó las especulaciones sobre cualquier rencor existente que lo aparte de los lineamientos, ya que "como militante que cree en este proyecto y voy a acompañar a todos los candidatos del Frente para la Victoria en todos los lugares".

Por último, Randazzo reiteró que seguirá acompañando a la presidenta como ministro "hasta el 10 de diciembre" y después no aceptará ser convocado a integrar el gabinete nacional del próximo gobierno, si es que gana Scioli. "Ya cumplí una etapa", sentenció.