El ministro del Interior y Transporte y precandidato presidencial Florencio Randazzo, criticó con dureza a rival de cara a las PASO y gobernador bonaerense, Daniel Scioli, a quien acusó de haber objetado en 2003 la derogación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, que beneficiaron a represores que participaron de la última dictadura militar.

Randazzo pidió a los militantes oficialistas y a la gente que "no olviden" que Scioli en 2003 "decía que ningún país serio retrotrae leyes", planteando su disidencia con la medida que finalmente tomó el entonces presidente Néstor Kirchner y marcó el comienzo de la política oficial de defensa de los derechos humanos a través de la condena a represores.

 "Tenemos diferencias con el gobernador. Con respecto a los derechos humanos, Scioli en 2003 decía, cuando Néstor Kirchner mandó al Congreso la derogación de la ley de Obediencia Debida y Punto Final, que ningún país serio retrotrae las leyes", afirmó el titular de la cartera de Transporte.

Como si esto no alcanzara para criticar al gobernador, el ministro nacional recordó además que "hace un año y medio atrás Scioli estaba" con el líder del Frente Renovador, Sergio Massa,  negociando "si cerraba una lista en forma conjunta".

"Scioli, hace un año y medio, estaba con Massa viendo si cerraba una lista en forma conjunta. Yo de esas cosas me acuerdo. Por eso tengo diferencias", dijo el funcionario nacional, que además cuestionó la existencia de un "poder económico y mediático que intenta condicionar el escenario electoral, promocionando candidatos, como a Mauricio Macri, y dentro del Frente para la Victoria, que quiere decidir a través de Scioli".

Por último, Randazzo retomó la antigua polémica sobre sus dichos de que si ganaba Scioli el proyecto nacional "quedaba manco", lo cual generó repudio por la implícita referencia al brazo ortopédico del mandatario.

"Yo no tuve ninguna descalificación dura sobre Scioli, se lo intenta victimizarse a Scioli cuando uno plantea las diferencias que uno tiene. Fue un acto de enorme hipocresía decir que cuando fui a Carta Abierta me había referido a una discapacidad que tiene el gobernador, eso es un disparate que no tiene ningún asidero. Me referí al proyecto de gobierno y no a la persona", concluyó el ministro.