Dos días después de haber renunciado a su cargo como titular de cátedras en la Universidad Nacional de La Plata, el juez Horacio Piombo sigue purgando su culpa por los aberrantes fallos que perdonaron a violadores y abusadores -sobre todo el que redujo la pena a un abusador de un nene de 6 años con el argumento de que el chico tenía tendencias gay-, y ahora decidió renunciar como miembro de la Cámara de Casación, desde donde hizo sus polémicos pronunciamientos.

Piombo comunicó su decisión de alejarse del cargo de juez, para tramitar su jubilación como magistrado.

La información se conoció en la tarde del jueves, dos días después de que el magistrado anunció su renuncia como docente a la Facultad de Derecho de La Plata. Esto último lo hizo el mismo día en que el Consejo Directivo de esa casa de estudios analizaba un pedido de juicio académico en su contra.

Cabe mencionar que la reducción de pena a un violador de un nene de 6 años, firmada por Piombo y su par Sal Llargués, fue apelada por la fiscalía de Casación y se encuentra a consideración de la Suprema Corte bonaerense, que deberá resolver si revoca la sentencia o la deja firme.

Además, Piombo fue expulsado de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Mar del Plata, mientras que Sal Llargués fue apartado de la Universidad Nacional del Sur (UNS) de Bahía Blanca y del Consejo de la Magistratura bonaerense, donde desempeñaba una función administrativa.

Por otra parte, cabe recordar que Piombo y Sal Llargués ya afrontaban, además, un jury de enjuiciamiento por "mal desempeño de sus funciones" a raíz de una decisión similar en 2011, cuando redujeron la condena a un pastor evangélico acusado de abusar de dos adolescentes, de 14 y 16 años, de una villa de la localidad bonaerense de Merlo. Este fallo tuvo como argumento que las chicas eran de una familia pobre, donde mantenían relaciones sexuales y promiscuas desde corta edad.