Una derrota por 1 a 0 ante Libertad que lo dejó fuera de los dos primeros puestos del grupo 7 de la Copa Libertadores fue la que sufrió esta noche Estudiantes en el estadio Nicolás Leoz, de Asunción, donde cayó por imperio de la superioridad de su rival pero, esencialmente, de su propia impotencia futbolística.

Estudiantes la pasó mal en el primer tiempo pero lo tuvo a Agustín Silva para salvarle las papas cuando todas las resistencias estaban superadas, en lo que supuso además una reivindicación para el guardavallas después del golazo desde casi 50 metros que le convirtió Pablo Barrientos el pasado lunes por el campeonato argentino.

La diferencia en el juego "pincha", en cambio, no existió respecto de ese cotejo que perdió 2-0 con San Lorenzo, ya que nunca pudo hacer pie en el medio, flaqueó cuando lo atacaron por el medio y le faltó pimienta arriba, aún con el regreso hoy de Guido Carrillo.

Todo lo contrario exhibió el conjunto paraguayo, que a la solidez defensiva que encabezó el "Ganso" Pedro Benítez le sumó la dinámica de Jorge González y la recuperación de Sergio Aquino en el medio y el entusiasmo y la potencia de Santiago Tréllez (hijo del recordado delantero colombiano John Jairo Tréllez), autor de la victoria en su primer tanto con la camiseta albinegra cuando promediaba el segundo período.

AMPLIAR

El segundo tiempo, en tanto, no le resultó tan austero a los hoy dirigidos por Carlos Compagnucci (Mauricio Pellegrino debió cumplir una fecha de suspensión), porque a pesar de las deficiencias mencionadas lograron mantener a los dueños de casa más alejados del arco defendido por Silva.

Sin embargo los platenses se dejaron sorprender por un pelotazo largo en el que falló Leandro Desábato en el cuerpo a cuerpo con Tréllez, permitiendo que éste ganara la posición por izquierda y definiera con un derechazo cruzado.

A partir de allí el equipo argentino fue a quebrar lanzas por la igualdad con más enjundia que ideas y, sobre todo, careciendo de cohesión entre líneas para parecerse al equipo corto que ameritaban las circunstancias de este partido ante el solitario puntero de este grupo.

Y de hecho tan solo con eso hasta pudo bastarle al "Pincha" para arrimar un punto a sus alforjas coperas, que esta noche quedaron vacías de cosecha por primera vez en el certamen, luego de la victoria por 3-0 en el debut ante Barcelona, de Ecuador, en La Plata, y el posterior empate en uno frente a Atlético Nacional, de Medellín, en Colombia.

Pero lo de Estudiantes terminó siendo futbolísticamente anárquico y ese empate terminó siendo una quimera que se evaporó en su propia inercia.

"Nos vamos calientes porque no sumamos nada, nos quedamos con las manos vacías. Pero igual estamos vivos y vamos a buscar revancha contra ellos la semana próxima en La Plata. Personalmente tuve un buen partido pero no tiene nada que ver con algunas críticas que recibí, porque la gente tiene derecho a hacerlo si uno no rinde, pero estoy tranquilo porque trabajo para esto", reconoció justamente Silva en consonancia con esos conceptos del desarrollo.

Claro que para ese juego que se viene en el estadio Ciudad de La Plata la idea y las intenciones de Libertad son muy diferentes, al punto que el propio "Ganso" Benítez avisó que irán a Argentina "para lograr en el próximo partido la clasificación a octavos de final".

Así Libertad se subió a la cima de las posiciones del grupo con 7 unidades, escoltado por Atlético Nacional con 5, Estudiantes cayó al tercer lugar con los 4 que tenía, mientras que Barcelona cerró la primera rueda sin puntos en su haber.