El gobernador bonaerense, Daniel Scioli, respaldó la postura de firmeza adelantada por su ministro de Seguridad, Alejandro Granados, frente a la posibilidad de desmanes y saqueos durante las marchas que tendrán lugar antes de Navidad, al afirmar que se "actuará inmediatamente" y con "todo el rigor de la ley" contra quienes infrinjan la ley.

El mandatario puntualizó que si bien "estamos atentos todo el año", lo cierto es que ante las especulaciones de posibles desbordes y el hecho de que a mediados de diciembre se producen movilizaciones de reclamos por bolsones de comida, canastas y también homenajes por los muertos de 2001, se redoblarán los esfuerzos.

En ese sentido, remarcó que "tendremos todos los recaudos y la atención del caso" y de hecho en ese contexto se enmarcan las asignaciones de destino a la mayoría de los 10.000 policías egresados el fin de semana.

Por esto, manifestó su deseo de "llevar tranquilidad a la gente", porque "no vamos a permitir que nadie altere las fiestas y ante cualquier desborde de alguna organización se actuará inmediatamente".

Scioli formuló estas declaraciones poco después de conocerse el resultado de varios operativos simultáneos en el Gran Buenos Aires, tras los que se secuestraron más de 50 kilos de marihuana, 20 de cocaína y se detuvo a varias personas que integraban dos bandas narcos y otra dedicada a la piratería del asfalto.