La divulgación del informe realizado por el Banco Central advirtiendo sobre deficiencias en el Banco Nación y advirtiendo sobre problemas de instrumentación del fideicomiso de esa entidad para poder erigirse en ente administrador de pagos a bonistas del canje de deuda, fue considerada "una lamentable operación" contra el gobierno, por parte del ministro de Economía, Axel Kicillof.

El funcionario dijo que el informe en cuestión no es reciente como se lo planteó desde el diario La Nación sino de hace un año atrás y las falencias en cuestión fueron subsanadas y ponen en  riesgo al fideicomiso como entidad de administración de pagos.

Además, relativizó los alcances del análisis, porque este tipo de papers internos de auditoría del Banco Central sobre bancos son "habituales" y no necesariamente redundas en la afectación de las entidades ni en problemas futuros, porque "justamente son observaciones" para que mejoren sus procesos internos de trabajo.

Por esto, Kicillof informó que "Nación Fideicomisos ha recibido las recomendaciones y las ha empezado a aplicar, pero no se encuentra nada de ninguna gravedad que lo invalide como ente administrador de los pagos de deuda".

Por otra parte, el titular del Palacio de Hacienda también rechazó las afirmaciones del ex secretario de Finanzas y responsable del primer canje, Guillermo Nielsen, advirtiendo que los fondos de  Nación Fideicomisos son "embargables". "De ninguna manera es así. Nielsen estuvo, formó parte del equipo de gobierno cuando se hicieron los canjes. La verdad es que últimamente me llama mucho la atención sus declaraciones augurando el desastre", afirmó Kicillof.