En la canción popular picaresca "No hay papel", el compositor y humorista Hugo Varela, inmortalizó la desesperación de descubrir la ausencia de papel en un inodoro de un café después de consumado el desahogo; la escena termina con el infortunado sacrificio de la corbata rojo punzó. A los centenares de trabajadores que se desempeñan en organismos provinciales y municipales de las torres administrativas gubernamentales 1 y 2 de La Plata les pasa algo parecido pero peor. Los 3 baños de varones que tiene cada una de las torres en sus pisos -una tiene 15 pisos y la otra 16- están inhabilitados o cerrados de hecho por personal de mantenimiento.

Esto afecta a trabajadores de organismos provinciales de distinto rango y nivel, como la sede del ministerio de Justicia, el de Asuntos Agrarios, el Tribunal de Cuentas, el Organismo para el Desarrollo Sostenible y la Dirección Provincial de Estadística y áreas de inspección escolar, entre otros. En tanto, algunas de las oficinas municipales afectadas son la Agencia Municipal de Recaudación, el departamento de obras particulares, etc.

En el caso de la Torre 2, que funciona en 12 y 53 (que tiene 15 pisos), en la mayoría de los habitáculos de inodoros hay un cartel pegado que dice "cerrado por falta de válvula" o directamente está la puerta atada con un alambre y dice "no usar".

En el caso de la Torre 1, hay inodoros que no están cerrados, pero al estar desconectados de la descarga de agua están tapados hace semanas, convirtiéndose en focos infecciones para el personal que se desempeña en el lugar o quienes tienen que hacer sus necesidades mientras esperan un trámite. La postal es decadente, ya que en algunos casos han sacado los inodoros y la materia fecal está esparcida en piso y estructura hace tiempo.

Como las autoridades públicas no realizan las inversiones ni reparaciones correspondientes, los trabajadores de limpieza se desentienden y directamente anulan los inodoros. Esto comenzó hace meses, se agravó en las vacaciones de invierno y directamente se coronó con el cierre de todos los baños de varones, donde sólo funcionan los mingitorios para orinar; si los trabajadores tienen que hacer otro tipo de necesidades fisiológicas deben ir a otros edificios públicos cercanos, como la Dirección de Escuelas o la Legislatura.

Para colmo, en la torre 1 siguen destrozados los ventanales periféricos en los pisos 1 y 2, que fueron rotos por actos vandálicos en la final del mundial. Por esto, quienes suben por las escaleras externas literalmente lo hacen exponiéndose a caer al vacío. Y días atrás, con el temporal que existió, la lluvia y el viento entraban llegando a las oficinas y despachos de los trabajadores de áreas municipales.