La lluvia dio lugar a un temporal de fuertes ráfagas de viento en el sudeste bonaerense y el límite con Río Negro, por lo cual en muchos municipios las autoridades locales ordenaron suspender las clases en las escuelas.

Algunos de los distritos donde a partir del mediodía se suspendieron las actividades lectivas fueron Tandil, Mar del Plata y Necochea.

La Jefa distrital de Mar del Plata, María del Carmen Id, fundamentó la decisión en que ya durante la mañana había "16 escuelas con problemas de infraestructura y otras diez también por problemas de acceso", por voladuras, estructuras caídas y anegamientos de calles.

Desde Tandil, el subcomisario Ramón García dijo que el cuadro era dentro de todo "normal", pero se suspendieron las clases "por turno tarde y noche" porque "se espera que los vientos se intensifiquen".

En tanto, en Río Negro el gobierno también suspendió las clases en ciudades cercanas a la costa, como Viedma, la capital provincial, San Antonio Oeste, General Conesa y Sierra Grande, como consecuencia de las fuertes lluvias con ráfagas de viento que comenzaron a azotar la zona desde el sábado en la noche.

Por ejemplo, tan sólo en Viedma cayeron 100 milímetros en 24 horas y las ráfagas de viento llegaron a los 90 km por hora en zonas urbanas, lo cual derivó en desbordes cloacales y calles anegadas que llevaron a una docena de familias a autoevacuarse.