Isla Martín García: naturaleza e historia para disfrutar en un fin de semana largo
10-01-2025
11-07-2014 | DESTINO BONAERENSES PARA ESCAPADA DE FINDE
Isla Martín García: naturaleza e historia para disfrutar en un fin de semana largo
 Este lugar mágico, donde la naturaleza convive con la historia, está ubicado prácticamente en la confluencia de los ríos Uruguay y de La Plata, a 33,5 kilómetros del puerto de Tigre y a cuatro de la costa uruguaya.
Desde la lancha que parte del Puerto de Tigre rumbo a la isla Martín García, el turista puede observar sucesivamente el Monumento al Remero, el Puerto de Frutos y el Parque de la Costa y luego, ya sobre el Río de la Plata, las costas de Buenos Aires, para unas tres horas después arribar a destino.

Este lugar mágico, donde la naturaleza convive con la historia, está ubicado prácticamente en la confluencia de los ríos Uruguay y de La Plata, a 33,5 kilómetros del puerto de Tigre y a cuatro de la costa uruguaya.

Sus 168 hectáreas, a 27 metros sobre el nivel del mar, cuentan con la humedad suficiente para albergar selvas en galería y la típica flora y fauna del Delta, entre ellos lagartos overos de hasta más de un metro que merodean por el camping en espera de ser alimentados por los turistas.

Pero eso no es todo, por cuanto la historia le reservó a la isla también el lugar de testigo de hechos que conmocionaron a nuestro país.

Años atrás, la única opción para el turista era un ida y vuelta en el día, ya que no había hospedaje, pero hoy las cosas han cambiado: hay hostales, un camping que cuenta con albergues y la Hostería Martín García, con pensión completa, donde los comensales se solazan dándoles de comer a los lagartos overos que se aparecen en la orilla del río a reclamar su almuerzo.

El visitante tendrá en la isla la posibilidad de recorrer lugares que aún conservan su estado primitivo, como el viejo faro, emblema de la isla -que data de 1881 y que dejó de funcionar en 1927- que fue erigido durante la primera presidencia Julio A. Roca.

El museo, que surgió por iniciativa de los isleños con la colaboración de la Armada, exhibe objetos personales de importantes figuras históricas, documentos que testimonian hechos de la época colonial y también armas de guerra.

El antiguo penal, donde alojaban a reos de alta peligrosidad tanto de Buenos Aires como de Montevideo; una panadería, inaugurada en 1813 y considerada de excelencia en la elaboración de pan dulce, y el cine-teatro, son otros de los atractivos que tientan al turista a recorrerla.

También el laboratorio donde el doctor Angel Mazza, descubridor de la vacuna contra el mal de Chagas, desarrolló gran parte de su actividad.

El penal también sirvió para mantener cerca de Buenos Aires, pero  a buen cobijo y suficientemente aislados e incomunicados, a cuatro expresidentes: Hipólito Yrigoyen, Marcelo T. de Alvear, Arturo Frondizi y Juan Domingo Perón.

Se cuenta que Alvear llegó con su mujer, la cantante lírica Regina Pacini, con su médico personal y con una comitiva integrada por secretarios y personal doméstico.

No sólo eso: también hizo trasladar a la prisión su inodoro personal de porcelana, pintado a mano, que hoy se exhibe en el museo de la isla.

Frondizi fue el que más tiempo estuvo preso allí: un año y medio, a partir del 29 de marzo de 1962.

En cuanto a Perón, permaneció en Martín García sólo tres días -del 14 al 17 de octubre de 1945- ya que la manifestación del pueblo a Plaza de Mayo, voceando por su libertad, hizo imposible retenerlo más tiempo.

La isla Martín García fue descubierta en febrero de 1516 por Juan Díaz de Solís, quien al buscar un paso interoceánico se topó con el Río de la Plata y, en una de estas exploraciones, concretó el hallazgo.

De allí en más, la isla fue testigo de un sinfín de batallas y hechos históricos, como el pase de las flotas anglo francesas (en el marco de la batalla de la Vuelta de Obligado); la demora de tripulantes del acorazado Graff Spee, y la huída del almirante Guillermo Brown hacia Montevideo.

También ofició como puerto de cuarentena durante las epidemias de cólera y fiebre amarilla, que se propagaron por Buenos y Montevideo.

En 1983, al retornar la democracia y bajo el gobierno de Raúl Alfonsín fue declarada "Monumento Histórico Nacional y Reserva de Flora y Fauna", por lo que la isla Martín García pasó a explotarse como un atractivo turístico que vale la pena visitar.