Coronel Suárez: 13 años de cárcel a periodista Estefanía Heit y 18 al falso pastor Olivera
31-01-2025
26-05-2014 | El final de dos sádicos
Coronel Suárez: 13 años de cárcel a periodista Estefanía Heit y 18 al falso pastor Olivera
Un tribunal de Bahía Blanca condenó a la pareja que durante casi un año mantuvo cautiva, golpeó, abusó y dio las sobras y alimento para perros a una mujer. La víctima estuvo en la audiencia y dijo "son dos enfermos que no merecen ningún beneficio".

La Justicia de Bahía Blanca condenó este lunes a 13 años de cárcel a la periodista Estefanía Heit y a 18 años a su pareja, el falso pastor Jesús Olivera, por haber mantenido cautiva, reducir a la servidumbre, abusar sexual y estafar a Sonia Molina durante casi un año en el domicilio de los imputados en Coronel Suárez.

El fallo estuvo a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de Bahía Blanca, integrado por los magistrados a cargo del Tribunal Oral Criminal (TOC) 1 de esa ciudad María Elena Baquedano, Mario Lindor Burgos y Hugo Da Rosa.

La sentencia condenó a la periodista del canal de cable de Coronel Suárez por "reducción a la servidumbre, estafas reiteradas y lesiones graves" y a su pareja Olivera -que decía ser pastor y pedía plata para montar una iglesia nueva- "reducción a la servidumbre, lesiones graves, estafas y abuso sexual".

Sonia Molina, la víctima de la sádica pareja -que mantenía una doble vida en Coronel Suárez,  haciendo tareas institucionales mientras la tenían cautiva, torturaban y abusaban-, estuvo presente durante la audiencia de sentencia, tras la cual dijo "se hizo justicia", más allá de que esperaba que el Tribunal condenara a los acusados a 18 y 22 años como pidió el fiscal.

"Creo que les correspondían mucho más pena, pero en cierta forma estamos conformes. Se hizo justicia y lo importante es que no van a estar en la calle", afirmó Molina, quien dijo no sentir rencor ni odio hacia sus captores, porque "son dos personas enfermas que tiene que estar presas, sin beneficio alguno".

Los hechos investigados se sucedieron entre el 9 de agosto del 2012 y el 12 de noviembre del mismo año, en el domicilio de Grand Bourg 1823, de Coronel Suárez, donde Sonia Molina, tras ser engañada por la pareja con que la iban a ayudar a terminar sus estudios, fue virtualmente secuestrada y sufrió el mayor calvario de su vida.

Allí, según la acusación del fiscal del caso, la víctima sufrió "maltratos físicos consistentes en golpes y agresiones efectuadas mediante las manos, puños y rodillas, y la utilización de elementos varios, provocándole lesiones y quemaduras".

La mujer fue abusada sexualmente y era alimentada con alimento para perros. Los agresores la maltrataban argumentando que se "portaba mal" y tenían que ayudarla a que "sacara el diablo" de su cuerpo. Una vez intentó escaparse y la atraparon y golpearon dejándola morbosa, tras lo cual semanas después vio que Olivera se marchaba con cosas para quemar, entre las que estaba su documento y otras pertenencias; ahí Molina tomó conciencia de que la querían matar y se desesperó, logrando escaparse por una ventana rota y salir a pedir ayuda tambaleándose.

El caso provocó estupor nacional, no sólo por el nivel de agresividad y saña sino por la doble vida que llevaban los captores, sobre todo la periodista, que era la conductora del noticiero de Cablevisión. Hoy llegó al final, con la condena de los dos.