Poco después de que la justicia absolvió a cinco acusados de matar en un linchamiento a un delincuente en La Matanza hace cuatro años, la presidenta del bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria, Juliana Di Tulio, pidió "responsabilidad" a los actores de los tres poderes del Estado, a los medios y la sociedad para "condenar estos hechos que son un delito".

"Acá hay que parar con eso de que la gente hace justicia por mano propia porque está mal o desesperada. Esto hay que llamarlo como lo que es, un delito. La dirigencia debe ser responsable y la justicia actuar seriamente", dijo Di Tulio.

La legisladora oficialista se pronunció de esta forma después de que se conoció el primer fallo judicial para los acusados de perpetrar un linchamiento contra un supuesto delincuente. Como el acto colectivo en banda diluye las responsabilidades individuales penales particulares, todos fueron absueltos, lo cual generó polémica.

A saber, a Lucas Navarro, de 15 años, lo lincharon la noche del domingo 28 de marzo de 2010, en el barrio Los Pinos, de Isidro Casanova, La Matanza. Participaron en el ataque a golpes casi 50 vecinos de un barrio de clase media, argumentando que junto con dos cómplices, habían intentado robarle el auto a un vecino.

Por el crimen hubo cinco imputados: Horacio Ronda y su hijo, Gastón Ronda; Horacio Adrián González y su padre, Norberto González, y un vecino, Gastón Dillman. Salvo este último, que había acordado una sentencia de tres años en un juicio abreviado, el resto fue absuelto por falta de pruebas, por parte del Tribunal Oral en lo Criminal N° 5 de La Matanza, integrado por Javier González, Matías Deane y Gabriela Rizzuto.

Di Tullio sentenció que "estos ataques no se llaman justicia por mano propia como dicen algunos, son un delito y punto".

En este sentido, pidió "ser muy responsables y poner paños fríos" frente a estos episodios de violencia, y sostuvo que esa responsabilidad les cabe no sólo a quienes integran las poderes del Estado sino "también a los medios de comunicación".

En ese marco, consideró "una barbaridad" lo expresado por el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, en relación a la "tranquilidad" que siente porque su hija vive en el exterior.