Luján: Los barrios inundados esperan
09-07-2025
19-03-2014 | POCO CAMBIo
Luján: Los barrios inundados esperan
Pasó más de un mes y los barrios inundados siguen esperando obras en el distrito de Luján. En algunas de las zonas afectadas por el agua, a principios de febrero, persiste la carencia de obras y de mantenimiento de calles. Sólo hubo escasos trabajos de emergencia.
Si vuelve a llover con la intensidad registrada en los primeros días de febrero, todo indica que el agua volvería a invadir decenas de viviendas de barrios lejanos al río Luján pero carentes de obras que permitan un buen escurrimiento de las aguas.

EL CIVISMO recorrió algunos lugares afectados por aquella tormenta del segundo fin de semana de febrero, sectores de Luján en los que se inundaron casas y se volvieron intransitables la mayoría de las calles.

"Sabemos que la Municipalidad despejó un desagüe a unas cuadras, pero nada más. Acá no se tocó nada. Está todo igual o peor que cuando nos entró agua en la casa", dijo un vecino de la calle Saulmer, en el Barrio Universidad, uno de los que padeció las fuertes precipitaciones en las que el agua tardó varios días en escurrirse.

En prácticamente todas las calles de ese barrio se nota la ausencia de zanjas adecuadas para que el agua no se estanque e invada calles y viviendas. En otras zanjas, el agua perdura, como se observó el miércoles a la tarde en las esquinas que rodean a la planta de hormigón de la Cooperativa Eléctrica.

Además, el barrio convive con un amplio predio de Vialidad en el que las malezas abundan porque no se le realiza ningún tipo de mantenimiento.

En el Barrio Los Gallitos, en las zanjas de las calles principales el agua colmaba su capacidad y cualquier lluvia leve amenaza con desbordarlas, a pesar de que desde el domingo no se registraban precipitaciones. Luego de las fuertes lluvias de ayer los problemas se deben haber profundizado.

Durante todo este mes, el único trabajo para paliar lo ocurrido fue realizado por los vecinos en un sector cercano a la abandonada obra de la autopista 5. Limpiaron los desagües para ayudar al escurrimiento, pero lo hicieron en un pequeño tramo.

"Hasta acá no llegaron ni los bomberos. La última cuadra que socorrieron fue 33 Orientales. Todavía no vimos que se realice ninguna mejora", contaron vecinas que estaban a metros de un zanjón que, a pesar de haber trascurrido varios días sin lluvia, estaba lleno de agua estancada. Esa vecina vio su casa rodeada de agua que venía desde la obra inconclusa de la autopista y ganó todo su patio.

Por su parte, transitar el interior del Barrio Luna en jornadas en las que no hay indicios de lluvia es, de todos modos, un suplicio. Prácticamente no hay una sola calle que esté medianamente mantenida. Pozos, huellones, carencia total de zanjeo y abundantes ramas y pastizales impiden cualquier posibilidad de escurrimiento de las aguas. De hecho, a mediados del año pasado este medio publicó un artículo detallando esa misma situación, sin que hasta el momento se hayan llevado a cabo modificaciones sustanciales a pesar de los reiterados reclamos vecinales que todavía se mantienen.

Ese barrio también sufrió fuerte el impacto de la última gran tormenta. Además, en esa zona se suma el peligro latente del desborde del arroyo Gutiérrez. En febrero ese arroyo saturó su cauce y generó zozobra en decenas de viviendas.