Los principales líderes del ruralismo argentino confirmaron que podrían paralizar las ventas de soja a partir de abril, cuando comienza la cosecha, si el Gobierno Nacional no modifica su estrategia económica actual y escucha los reclamos del campo.

Ante estos hechos, el secretario general de la Asociación Argentina de Trabajadores Horticultores y Floricultores (AATHF), Gustavo Arreseygor, afirmó que, "son unos caraduras que quieren extorsionar al Gobierno, además se ve que tan mal no les va si pueden guardar la producción, no solamente la de abril, sino todo lo que hay acopidado en los campos".

Respecto a los problemas de empleo del sector, el gremialista manifestó su enojo. "Son unos inmorales, se olvidan que en la década del 90 estaban fundidos, y ahora se quejan, deberían poner a los trabajadores en blanco y no tenerlos de manera irregular, en algunos casos como esclavos", disparó.

Finalmente desde la conducción de la AATHF, se encuentran evaluando las acciones a tomar en caso que los sectores rurales cumplan con sus amenazas respecto a la producción sojera.