A raíz de un pedido judicial, se realizan una serie de excavaciones en el ex destacamento policial de Lomas del Mirador, ubicado en la calle Indart 106, donde podrían estar los restos de Luciano Arruga, el joven que desapareció el 31 enero de 2009. 

En tanto, los familiares y amigos del joven fueron al lugar y observan las tareas llevadas a cabo por antropólogos forenses que llegaron desde La Plata.

Por cierto, el indicio que llevó al juez de garantías de La Matanza, Gustavo Banco, a hacer lugar al pedido de la familia, surge de una pericia realizada en 2009 por investigadores con perros adiestrados que olfatearon posibles rastros humanos en el lugar. 

Desde allí surgió la necesidad de realizar una excavación que comienza a llevarse a cabo casi cuatro años después. 

El ex destacamento policial de Lomas del Mirador fue convertido en un espacio para la memoria. Allí, desde hoy, se llevan a cabo tareas de remoción y análisis del suelo en aquellos lugares donde se realizaron nuevas obras.

Si bien hay pruebas que indican que Arruga estuvo detenido en la comisaría segunda de Laferrere, los investigadores creen que luego podría haber sido trasladado a esa ex sede policial. El mismo lugar donde, según consta en la Justicia, había estado detenido cuatro meses antes de su desaparición y había sido violentamente golpeado.

A cuatro años de la desaparición de Arruga, el caso volvió a reactivarse la semana pasada tras el cambio de carátula y la detención del teniente de la Policía Bonaerense Julio Torales, acusado de haber torturado a la víctima antes de su desaparición.

E.V